Caja Madrid y Bancaja estudian unirse mediante una 'fusión fría' que crearía la primera caja del país
- Junto a otras cinco cajas pequeñas, superarían en activos a La Caixa
- Los consejos de ambas entidades analizan la alianza este jueves
- Esperanza Aguirre se ha reunido ya con el gobernador del Banco de España
La 'fusión fría'
Los mayores obstáculos para lograr la reestructuración del sistema financiero, centrada en las cajas de ahorros, están siendo los órganos de dirección de las entidades: los presidentes y consejeros, ya sean de las Comunidades Autónomas, de los Ayuntamientos o de la iglesia -como sucedía en Cajasur-, se resisten a ceder poder a la hora de afrontar las fusiones.
Para esquivar esas dificultades, el Banco de España ha diseñado un mecanismo denominado Sistema Institucional de Protección (SIP), que consiste en que las entidades ponen en común los activos y el riesgo, creando un banco nuevo -que actúa como un holding-, al tiempo que cada caja puede mantener su propia identidad, es decir, su consejo de administración y sus oficinas.
Los consejos de administración de Caja Madrid y Bancaja se reúnen este jueves para estudiar la incorporación de la entidad valenciana a la fusión fría que capitanea la madrileña con otras cinco cajas pequeñas, una alianza que resultaría en la primera caja de ahorros de España por activos, superando a La Caixa.
El organismo directivo de Caja Madrid está convocado esta tarde para analizar la unión con Caixa Laietana, las cajas de Ávila, Segovia, Rioja e Insular de Canarias, aunque también se estudirán otras "posibles alianzas", entre ellas la posible incorporación de Bancaja a la fusión fría, según fuentes próximas al órgano de gobierno de la entidad.
Las mismas fuentes han precisado que la idea del presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, es informar de los pasos dados desde finales de mayo, cuando las seis cajas citadas anunciaron la intención de crear un Sistema Institucional de Protección (SIP) con el que compartir sus políticas de riesgo.
La primera caja de ahorros del país
Con todo, Rato podría plantear la posibilidad de incluir en ese proyecto a Caja Badajoz o a la intervenida CajaSur para aumentar así la dimensión del SIP y conseguir que los activos de Caja Madrid crezcan en un 25%, lo que facilita la obtención de recursos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
Otras fuentes han avanzado que también se podría debatir el "interés estratégico" de incorporar a Bancaja, que también ha convocado para esta tarde a su consejo de administración. Si finalmente se concrata la unión, se crearía una alianza de cajas que superaría en activos a La Caixa, la primera caja española hasta el momento.
Así, frente a los 279.700 millones de euros en activos que alcanzaría la caja catalana tras la absorción de Caixa Girona, la fusión fría de Caja Madrid con las cinco cajas pequeñas sumaría 227.560 millones de euros, aún en segundo lugar, pero la incorporación de Bancaja, hasta ahora en cuarto lugar, aportaría otros 111.460 millones, hasta casi 340.000 millones de euros.
Ganar tamaño
Por el momento, lo único que está claro es que el SIP inicialmente anunciado por la caja madrileña y las cinco regionales supone la creación de un grupo con unos activos próximos a los 227.500 millones, de los que 191.000 millones los aporta Caja Madrid, es decir, el grupo resultante tendría un 19% más de activos que la caja principal, por lo que para conseguir que crezcan el 25% necesitaría llegar hasta los 238.900 millones, unos 11.400 millones más.
Esa cantidad la conseguiría de sobra si finalmente se uniera con Bancaja, pero también podría con los más de 18.960 millones de activos de la intervenida CajaSur. Aún así, hay otras posibilidades como contar a la Caja de Ahorros Inmaculada (CAI), con cerca de 12.000 millones en activos, u otras combinaciones como la participación en el proyecto de Caja Badajoz (4.250 millones) o incluso, la de la Caja Círculo de Burgos (6.208 millones).
Todas estas posibilidades se harían para lograr un grupo "más grande y con mayor solvencia" que el propuesto hasta el momento, que pediría al FROB entre 2.500 y 3.000 millones de euros. Aunque, en el caso de que Bancaja se uniera al proyecto, esa cantidad podría aumentar hasta 4.500 millones, según las mismas fuentes.
"Buena noticia", según Aguirre
La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, ha asegurado que la integración de Caja Madrid con la valenciana Bancaja es "positiva" y una "buena" noticia para todo el sistema financiero español y ha confirmado que este miércoles ya se entrevistó con el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, con el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, y con el presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps.