El yuan alcanza sus máximos en 21 meses tras su flexibilización gradual

• Un yuan se cambia en el mercado de divisas a 6,81 dólares
• La Bolsa de Shanghái ha cerrado con una subida del 2,9%

China cede ante las presiones internacionales y flexibiliza gradualmente el yuan

La divisa de China, el yuan o renminbi (moneda del pueblo), ha alcanzado durante esta jornada bursátil sus máximos en 21 meses, 6,8110 frente al dólar, tras haber iniciado el día con un valor de 6,8275, el mismo que el del pasado viernes.

El máximo se alcanza después de que el Banco Popular de China anunciara este sábado en un comunicado la flexibilización paulatina de la divisa china, lo que fue aplaudido por EEUU, la Unión Europea (UE) y el FMI.

La Bolsa de Shanghái ha cerrado con una subida del 2,9%, tras el anuncio de la flexibilización gradual del yuan. Mientras que el índice general de Shanghái (acciones convertibles y no convertibles) ha finalizado su cotización diaria en 2,586.21 puntos, 72,99 puntos por encima del cierre del pasado viernes.

No obstante, el órgano responsable de la política monetaria china matizó el domingo que la anunciada flexibilización de la divisa del gigante asiático será gradual y que el tipo cambiario "se mantendrá a un nivel razonable y equilibrado".

Salvaguardar la estabilidad financiera

"En la actualidad no existen motivos para permitir mayores fluctuaciones o cambios en el tipo cambiario del renminbi", afirmó el banco central en su último comunicado del domingo, y en el que un portavoz de la entidad bancaria señaló que el objetivo es "salvaguardar la macroeconomía y la estabilidad financiera".

El anuncio se produjo en vísperas de la salida del presidente chino, Hu Jintao, hacia la ciudad canadiense de Toronto para asistir a la cumbre del G-20, donde según altos funcionarios chinos que le acompañarán, no está sobre la mesa el tipo de cambio del yuan "porque no es un asunto internacional, sino de soberanía china".

Prensa y foros de internet chinos consideran que Pekín cedió "a la presión extranjera", pero algunos economistas indican que lo hizo para evitar el conflicto en Toronto y centrarse en decisiones que le interesan, como la reforma de las instituciones financieras internacionales, por ejemplo.