Los chimpancés asesinan a sus vecinos para adueñarse de sus territorios
- Matan de forma violenta a otros individuos para expandir sus territorios
- Atacan en bandas, como 'pandilleros', y siguen a sus futuras víctimas
- El estudio se ha realizado con una comunidad de 150 chimpancés de Uganda
Los chimpancés actúan como bandas callejeras y asesinan a sus vecinos para expandir sus territorios. Siguen a sus víctimas y las atacan de forma violenta para adueñarse de sus posesiones. Se apropian de territorios y recursos ajenos que después se redistribuyen entre el resto de integrantes del grupo.
Desde hace tiempo, los antropólogos sabían que los chimpancés asesinaban a sus vecinos y sospechaban que lo hacían para ganar territorio. Ahora tienen la prueba evidente y definitiva, como demuestra una investigación desarrollado por científicos de la Universidad de Michigan. Durante la última década han estudiado los movimientos de una comunidad de chimpancés de Uganda y el trabajo acaba de ser publicado por la revista 'Current Biology'.
Los investigadores presenciaron durante estos diez años hasta 18 "ataques fatales" entre estas 'bandas de monos', a modo de 'pandilleros', y encontraron signos de otros tres ataques perpetrados por miembros de una enorme comunidad de unos 150 ejemplares en Ngogo, en el Parque Nacional de Kibale, en Uganda.
Sólo durante el verano de 2009, estos chimpancés llegaron a expandir su territorio hasta en un 22%. En la nueva región se podían alimentar de sus frutas favoritas, por lo que fue el lugar elegido para fecundar y criar a jóvenes chimpancés.
"Cuando empezaron a mudarse, sabíamos que habían matado a muchos chimpancés en esta zona. Nuestras observaciones nos ayudaron a resolver preguntas que nos hacíamos desde hace mucho sobre las agresiones letales entre los grupos de chimpancés", explica el principal investigador del trabajo, John Mitani.
'Modus operandi'
Los primates observan a sus enemigos. Realizan sigilosas y rutinarias 'patrullas fronterizas' del territorio vecino. Y después llega el ataque premeditado de todo el grupo. Una de las profesoras, Sylvia Amsler, siguió junto con un compañero a 27 machos adultos y adolescentes, y a una hembra adulta.
"Estuvieron de patrulla fuera de su territorio durante más de dos horas cuando sorprendieron a un pequeño grupo de hembras de una comunidad vecina. Casi inmediatamente después de realizar el contacto, los machos de la patrulla empezaron a atacarlas. Dos de ellas llevaban crías dependientes", describe Amsler.
Los 'patrulleros' atraparon y mataron a una de las crías bastante rápido. Lucharon durante 30 minutos para arrebatarle su cría a la otra madre, pero no pudieron. Al fracasar, descansaron durante algo más de una hora, tomaron a la hembra y a la cría como prisioneras y reanudaron el ataque.
"A pesar de que no pudieron quitarle la cría a la madre, estaba gravemente herida, y no creemos que pudiera sobrevivir", asegura la antropóloga. En la mayoría de los ataques observados en este estudio, las crías de los chimpancés fueron asesinadas, posiblemente porque son objetivos más fáciles que los chimpancés adultos.
“El hombre no tiene nada que ver con estas agresiones“
Los científicos todavía no saben si el fin último de los chimpancés son los recursos o los machos. Desconocen si se quedan con las hembras de los territorios invadios, pero sí han descartado que estos ataques se produzcan como consecuencia de la mano del hombre. "La violencia de los hombres tiene lugar por diferentes razones, por lo que no hablamos del mismo tema", señala el responsable, John Mitani.