Sarkozy apoya a su ministro de Trabajo en la polémica de la heredera de L'Oréal

• La heredera de la marca ha asegurado tener cuentas en paraísos fiscales
• La mujer del ministro dimitirá como consejera de Bettencourt

El primer ministro francés junto al ministro de trabajo

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha mostrado este miércoles su apoyo a su ministro de Trabajo, Eric Woerth, quien se encuentra sumido en el escándalo judicial y fiscal de la mayor millonaria de Francia, la heredera del grupo L'Oréal Lilliane Bettencourt, y que mañana afrontará una huelga contra la reforma de las pensiones.

Ha sido durante el Consejo de Ministros cuando Sarkozy ha aprovechado para mostrar "toda su confianza en Eric Woerth para llevar a cabo la reforma de las pensiones", según ha explicado a la prensa el portavoz del Gobierno, Luc Chatel.

Chatel salió al paso de una nueva polémica sobre las alegaciones de que Woerth, mientras fue titular de la cartera del Presupuesto (entre mayo de 2007 y marzo de 2010), pudo haber dado trato de favor fiscal a Bettencourt, quien ha reconocido tener cuentas en paraísos fiscales.

La familia de Woerth era "ajena a las irregularidades fiscales"

El portavoz ha asegurado que cuando Woerth condecoró con la Legión de Honor a Patrice de Maistre, el gestor de la fortuna de la millonaria, "no estaba informado de una eventual evasión fiscal" de Bettencourt.

Además, ha puntualizado que esa condecoración se decidió con un dictamen del Ministerio de Justicia.

El pasado lunes, el propio Woerth anunciaba que su mujer iba a dimitir como consejera en la gestión financiera de Bettencourt, aunque insistió en que ni su esposa ni él mismo estaban al corriente de las irregularidades fiscales de la millonaria, que además mantiene un contencioso judicial con su hija.

Desde la oposición de izquierdas, de donde han salido varias críticas contra el actual ministro de Trabajo, algunas incluso para pedir su dimisión, este miércoles el jefe de los diputados socialistas, Jean-Marc Ayrault, ha pedido al departamento de Justicia la apertura de una investigación sobre la supuesta evasión fiscal de Bettencourt.

Ayrault lo ha justificado porque sólo esa investigación puede clarificar si hubo un conflicto de intereses por la posición de Woerth y su mujer y acabar así con los rumores sobre la implicación del que durante casi tres años ha sido responsable de la lucha contra la evasión fiscal en el Gobierno.