Enlaces accesibilidad

Cielos abiertos entre Europa y Estados Unidos

  • Las compañías podrán invertir en aerolíneas del otro lado del Atlántico
  • El acuerdo para abrir los cielos lleva negociándose desde 2007

Ver también:  Especial de la Presidencia española de la UE

Por

La Unión Europea y Estados Unidos han dado un paso más en la liberalización de su espacio aéreo con la firma de la segunda fase del acuerdo de "cielos abiertos", por el que aerolíneas de ambos lados del Atlántico pueden volar desde cualquier punto de Europa o Estados Unidos.

A partir de ahora las aerolíneas podrán disfrutar de nuevas rutas y mayor capacidad de inversión en compañías del otro lado del Atlántico, aumentando su competitividad a partir de la reducción de costes.

"Cielos abiertos" y menos contaminantes

El ministro de Fomento, José Blanco, que dirige el último Consejo de Transporte bajo presidencia española, ha destacado a la prensa que el acuerdo es un éxito de la "economía sostenible", dado que tanto Bruselas como Washington se comprometen a través del acuerdo a reducir sus emisiones de CO2 a la atmósfera.

El comisario de Transportes, Siim Kallas ha destacado que este nuevo pacto transatlántico reportará unos beneficios de 12.000 millones de euros y la creación de unos 80.000 millones de empleos dado que la UE y EEUU representan el 60% del mercado aeronáutico mundial.

La vicesecretaria de aviación de Estados Unidos, Susan Kourland ha querido destacar "el paso adelante" que representa el acuerdo en la consecución de los "retos medioambientales" a los que se enfrentan ambos lados del Atlántico y dado que la segunda fase del acuerdo prevé nuevos compromisos de reducción de emisiones de CO2.

Los entresijos del acuerdo

Las negociaciones se han prolongado desde principios de 2007, pues Bruselas pretendía mayor capacidad de inversión en el negocio aéreo americano y Washington reclamaba menos limitaciones al ruido de los vuelos nocturnos en Europa.

La cesión mutua para alcanzar un pacto se ha traducido finalmente en que EEUU se ha comprometido a modificar la limitación del 25% de capital extranjero en sus aerolíneas y Bruselas ha prometido minorar sus normas sobre la contaminación acústica.

Bruselas también ha prometido aumentar la cuota de inversión permitida para capital estadounidense en sus aerolíneas. Aunque el acuerdo permitirá ampliar nuevas rutas transatlánticas, Washington sigue sin permitir a las compañías europeas realizar vuelos domésticos por el interior de Estados Unidos (sí en cambio entre una ciudad estadounidense y un tercer país).

El ministro José Blanco ha señalado que "la importancia" del acuerdo de cielos abiertos y ha querido destacar "la sensibilidad de la nueva Administración norteamericana" en este asunto.