Repsol y TOTAL se distancian de Irán ante las nuevas sanciones de Estados Unidos
- Las empresas siguen el ejemplo de Royal Dutch Shell y BP
Irán se enfrenta a una creciente presión económica que este lunes se ha manifestado en la decisión de dos empresas petroleras occidentales de dejar de vender su producto al régimen iraní.
Así lo han anunciado la empresa francesa TOTAL y Repsol ante las sospechas de que el petróleo es empleado para fabricar bombas en lugar de generar electricidad.
De este modo se sigue el ejemplo de los gigantes Royal Dutch Shell y BP, que suspendieron los suministros de gasolina a Irán, según informa el periódico económico británico The Financial Times.
Por su parte, Repsol no implementará un contrato de explotación del yacimiento South Pars, la mayor reserva del mundo de gas natural.
Estos anuncios llegan días antes de que el presidente, Barack Obama, firme una ley de sanciones contra Irán por su negativa a detener el enriquecimiento de Uranio.
Bajo esta nueva ley, Estados Unidos congelará activos y suspenderá contratos con todas aquellas compañías extranjeras que colaboren con el gobierno de Teherán.
Buscar el asilamiento de Irán
A pesar de todas estas medidas, que se suman a la cuarta ronda de sanciones aprobadas por la ONU, desde EE.UU, se defiende que probablemente no se logre disuadir a la República islámica de su objetivo nuclear.
De hecho, la primera reacción del presidente iranía, Mahmoud Ahmadinejad, fue la de rechazar las sanciones al considerarlas como un "pañuelo usado" y ha ido más allá al negarle la entrada al país a dos inspectores nucleares.