La Justicia francesa suspende el proceso por la fortuna de la heredera de L'Oréal
- De momento no hay fecha de reanudación del juicio
- La defensa de Banier y la de Bettencourt-Meyers habían solicitado la suspensión
- El caso ha salpicado a un ministro de Sarkozy
La Justicia francesa ha suspendido, sin fecha de reanudación, el juicio que ha comenzado este jueves contra el artista y fotógrafo François-Marie Banier, por aprovecharse presuntamente de la anciana y rica heredera de L'Oréal, la multimillonaria Liliane Bettencourt.
La presidenta de la 15 ª Sala de lo Penal, Isabelle Prévost-Desprez, ha "pedido más información", es decir, una investigación más profunda sobre los grabaciones lanzadas por la prensa.
El aplazamiento durará el tiempo que el Tribunal de Nanterre necesite para examinar las pruebas que puedan aportar las grabaciones de conversaciones privadas de la anciana Bettencourt, parte de cuyo contenido fue filtrado a medios de comunicación, así como para estimar qué instancia es competente en el caso.
El Tribunal Correccional de Nanterre (próximo a París), ha anunciado que durante el período que dure la suspensión del proceso se realizará una investigación sobre las grabaciones de conversaciones privadas de Bettencourt, presentadas por su hija, Françoise Bettencourt-Meyers, hace unos días.
Las grabaciones hechas por un antiguo mayordomo de la rica heredera y presentadas por Françoise Bettencourt-Myers ante la Justicia revelan además presuntas prácticas fiscales ilegales e involucran al actual ministro francés de Trabajo, Eric Woerth de quien se sospecha que dio un trato de favor a Bettencourt durante su mandato.
Según el diario Le Monde, el ministro se reunió con la dueña de L'Oréal una semana después de condecorar con la Legión de Honor al gestor de su forturna, Patrice de Maistre. "Nada ilegal" en este cita, afirma el periódico aunque sí confirma los fuertes lazos entre la multimillonaria y Woerth y alimenta un poco más la sospecha de un posible conflicto de intereses.
Presunto aprovechamiento de la debilidad de la mujer
En el proceso que ha comenzado este jueves contra Banier, de 63 años, éste debía responder sobre las acusaciones acerca del presunto aprovechamiento de la debilidad de la mujer, de la que recibió varios seguros de vida, numerosos cheques y obras de arte por valor de cerca de 1.000 millones de euros.
De confirmarse que esos regalos fueron obtenidos bajo presión, como asegura la acusación encabezada por la hija de Bettencourt -que pide la incapacitación de su madre, que se niega a someterse a exámenes médicos- Banier se expone a tres años de cárcel y a una multa de 375.000 euros.
En juego está el destino de la fortuna de Bettencourt, viuda de un ex ministro conservador francés, cuyas propiedades se valoran en unos 17.000 millones de euros (unos 23.670 millones de dólares) y de cuyo buen juicio duda su propia hija.
Otro tribunal, el de Gran Instancia de París, se ha pronunciado poco antes del anuncio de la suspensión a favor de la difusión del contenido de esas grabaciones, que ya filtraron hace unos días varios medios de comunicación franceses.
Tanto la defensa de Banier como la de Bettencourt-Meyers habían solicitado la suspensión del proceso en el comienzo del juicio.
Las conversaciones privadas grabadas y entregadas a la Justicia revelan, según el contenido hecho público, presuntas irregularidades de naturaleza fiscal cometidas al parecer por Bettencourt, además de implicar un ministro del Gobierno francés en un presunto trato de favor con la heredera de L'Oréal.
La hija de Bettencourt pretende desde hace meses demostrar que su madre está incapacitada para gestionar su fortuna y que su estado permitió que Banier se aprovechara de ello para obtener de la heredera la cesión de parte de su fortuna.