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Siete muertos en México en unas elecciones regionales marcadas por la violencia

  • Al menos 30 personas han sido detenidas con artefactos incendiarios
  • Se vota en la mitad del país y será un test para las presidenciales del 2012

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México acude a las urnas entre fuertes medidas de seguridad

La jornada electoral de México se ha saldado con al menos siete muertos, la detención de 30 personas con artefactos incendiarios, y una gran tensión ante la posibilidad de nuevos ataques del crimen organizado.

Cuatro de las muertes han tenido lugar en la ciudad de Chihuahua, en un acto que responde a las características del crimen organizado. Los cuerpos de cuatro hombres, cuya identidad no ha trascendido, han sido colgados de tres de los principales puentes del enclave.

Los colegios electorales en 14 estados (de los 32 del país) abrieron sus puertas para elegir a cargos regionales, desde alcaldes a diputados. Pero sobre todo, destaca la elección de gobernador en 12 de esos estados en medio de una gran rivalidad política.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó México durante 71 años hasta el 2000, cuando fue derrocado por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), ganaría hoy los comicios en diez estados, pero podría perder dos de sus principales bastiones, según datos preliminares, informa Efe.

En declaraciones a la prensa, por separado, los líderes del PRI, PAN e izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), principales fuerzas en esta disputa en las que el segundo y tercero fueron en alianza, han salido a dar a sus ganadores basados en los primeros sondeos.

Según la corresponsal en el país, Emilia Ayala, los comicios también "se están desarrollando con muchísimas medidas de seguridad. En algunos estados son, incluso, extremas como en Tamaulipas".

Allí, según la corresponsal, ha acudido a votar el hermano del asesinado Rodolfo Torre Cantú, Egidio Torre Cantú, ahora candidato, con chaleco antibalas y decenas de escoltas.

La prioridad: ir a votar con seguridad

Tras emitir su voto, Egidio Torre Cantú, en unas breves declaraciones a la prensa, ha instado a votar a la ciudadanía. "Venimos a votar, vamos a votar, y vamos a cumplir".

Un total de 9.000 los policías del estado vigilan los comicios de este domingo, según ha informado la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. Junto a ellos están presentes las fuerzas federales.

"Las cosas se están desarrollando con la mayor normalidad, no tenemos ningún incidente reportado", indicó a los medios el gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández, del PRI. El estado es base de los cárteles del Golfo y de Los Zetas.

El mandatario ha asegurado que la práctica totalidad de las mesas electorales se habían instalado y que se registraba una alta participación.

"Las condiciones están dadas para que la votación se lleve en forma normal en todo el estado", aseguraba anoche el presidente del Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM), Jorge Luis Navarro.

Atención especial en el estado de Chihuahua

Chihuahua, el estado más violento del país y uno de los que eligen gobernador, es otro de los estados donse se vigilan con atención los comicios tras el asesinato de un alcalde registrado el mes pasado y un correo amenazante hacia votantes y funcionarios electorales que ha circulado en los últimos días.

Días atrás, un correo electrónico firmado por el grupo delictivo "La Linea", perteneciente al Cartel de Juárez, amenazaba con ataques a quienes salieran a votar, por lo que el suceso podría tratarse de un intento de amedrentar a la ciudadanía.

Chihuahua, que elige gobernador, es la capital del fronterizo estado norteño del mismo nombre, considerado el más peligroso del país y donde se ubica la conflictiva Ciudad Juárez. A primera hora, Ciudad Juárez estaba desierta y escasamente vigilada por la policía.

Según el Instituto Estatal Electoral (IEE), al menos tres candidatos a alcaldes de Chihuahua solicitaron protección a la policía estatal debido a que habían recibido amenazas

También se presta especial atención a las elecciones en el estado de Sinaloa, cuna histórica del narcotráfico mexicano, donde se han registrado diversos ataques con bombas molotov a los cuarteles de campaña de los candidatos a gobernador en las semanas pasadas.

La prioridad para las autoriades es que se pueda votar con seguridad ya la abstención supondría darle la razón al crimen.

Detenciones en Oaxaca

Por otra parte, en Oaxaca, otro de los estados marcados como potencialmente conflictivos debido al enconamiento de los candidatos a gobernarlo y a pasados enfrentamientos sociales, se detuvo a, al menos, 30 personas con artefactos incendiarios.

Los detenidos fueron interceptados en dos hoteles de la capital oaxaqueña, Oaxaca, y aseguraron haber sido pagados para el robo de urnas por parte de la alianza opositora que conforman izquierda y derecha. La izquierda se deslindó de la acusación.

El estado tardó en instalar sus urnas, ya que el 70% no se habían instalado a tres horas de la apertura general de los colegios programada a las 08.00 horas (13.00 GMT).

Las autoridades electorales aseguraron luego que finalmente se instaló el 98% de ellas.

Más allá del crimen, tanto los conservadores del Partido Acción Nacional (PAN, actualmente al frente del Gobierno federal) como sus históricos rivales del Partido Revolucionario Institucional (PRI, que estuvieron 71 años en el poder) ven la cita con las urnas como un test para saber lo que sucederá en las presidenciales de 2012.