Francia inicia la tramitación parlamentaria de la proposición de ley contra el velo integral

• El Consejo de Ministros aprobó el proyecto de ley en mayo
• El Consejo de Estado recomienda no sacar la ley adelante

Mujeres con niqab

La Asamblea Nacional francesa inicia este martes la tramitación parlamentaria de la proposición de ley contra el velo integral adoptada por el Consejo de Ministros el pasado mes de mayo.

Pero la medida es, según los expertos, difícil de sacar adelante ya que puede resultar complicada de aplicar y puede ser inconstitucional.

A favor y en contra del velo íntegro

El articulado adoptado por el Consejo de Ministros establece que las mujeres que vayan por la calle con burka o niqab podrían ser sancionadas con multas de hasta 150 euros, mientras que quienes les presionen para ir así vestidas se exponen a penas de hasta un año de cárcel y multas de hasta 150.000 euros.

Al darse a conocer dicho proyecto de ley el Consejo de Estado, un órgano consultivo no vinculante, advirtió que "Una prohibición absoluta y general del velo integral como tal no podría encontrar ningún fundamento jurídico incontestable" y estaría "expuesta a fuertes incertidumbres constitucionales".

A pesar de dicha advertencia el Consejo de Ministros sacó adelante la propuesta del gobierno de Sarkozy.

El pasado lunes, la ministra francesa de Justicia subrayaba el carácter "pedagógico" de proyecto de ley y recalcaba que no se trataba de algo "antiburka", sino que se trataba de evitar que cualquier persona escondiera su rostro en espacios públicos.

Más allá de estas justificaciones, los partidarios de la prohibición del velo aseguran que esta prenda supone una vulneración de los ideales republicanos de la laicidad y la igualdad de género franceses.

Pero para los opositores a la ley estos alegatos no son suficientes. "Una prohibición total del velo supone una vulneración de los derechos de la libertad de expresión y de religión de las mujeres que llevan el burka", asegura John Dalhuisen, un experto sobre la discriminación en Europa y miembro de Amnistía Internacional, a través de un comunicado.

Esta organización ha instado a los diputados franceses a que rechacen el proyecto de ley y ha recordado que numerosos expertos franceses e internacionales han alertado de que la ley que pretende sacar adelante el Gobierno francés "contribuiría a estigmatizar a la población musulmana".

¿Qué hay detrás de este proyecto de ley?

La cuestión del velo se ha convertido en el foco de un debate sobre el Islam y el sistema laico de Francia, que separa Iglesia y Estado.

El diputado coumnista André Gerin, que presidió una investigación pública que recomienda la prohibición, asegura que los velos no son más que "cárceles portátiles".

Pero el país se encuentra inmerso en esta cuestión desde hace tiempo. Una prueba de ello es que el pasado mes, una mujer fue detenida en Nantes por conducir con el niqab, que le impedía la visión lateral. Su abogado acusó a la policía de tener perfiles raciales y presentó un recurso.

Pero más allá de derechos humanos y libertades, los críticos acusan a Sarkozy de explotar el tema para distraer la atención de sus problemas políticos y los bajos niveles de aprobación que está registrando en los últimos meses.

Por otro lado, otros también argumentan que la prohibición podría incrementar las tensiones con las comunidades musulmanas en el país y el extranjero.

De hecho, el debate en Europa ha provocado fuertes reacciones en el norte de África, donde muchos de los musulmanes de Francia tienen sus orígenes.