Jiménez recuerda a las comunidades que la ley del aborto es de obligado cumplimiento para todas
- La ministra se ha referido a las reticencias de Murcia a aplicar la ley
- Critica al PP por "incentivar" esta situación en las comunidades
- No ve necesario un reglamento sobre la objeción de conciencia
Ver también: Preguntas sobre el aborto/ La nueva ley/ Antigua ley
La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, ha recordado a las comunidades que laley de interrupción voluntaria del embarazo, que entró en vigor este lunes, es de obligado cumplimiento para todas, porque existen las condiciones técnicas y prácticas para cumplirla y todas tienen la documentación necesaria.
En declaraciones a los medios en los pasillos del Senado, Jiménez se ha referido a las reticencias de algunos gobiernos autonómicos, como el de Murcia, a aplicar la ley del aborto.
A ellos ha querido dirigirse para recalcar que la norma ha entrado en vigor e insistir en que "todas las comunidades autónomas, absolutamente todas, están sometidas al imperio de la ley".
Críticas al PP por "incentivar"
Jiménez ha criticado al PP, en este contexto, por "incentivar" una situación en la que cada comunidad decide qué ley cumple y cuál incumple, o en qué manera cumple o no, cuando "todos tienen que cumplirla con absoluta exactitud".
Tras indicar que las autonomías han recibido en tiempo la información necesaria para aplicar la norma, la ministra ha sostenido que la gran mayoría de las comunidades está preparada.
Hasta ahora, la única que ha ido derivando pacientes para interrumpir el embarazo a otras comunidades ha sido Navarra, y la ley contempla que si alguna autonomía, con carácter excepcional, no puede ofrecer la prestación que la mujer requiere en el momento en el que se necesita, "puede excepcionalmente derivarlo a otra comunidad".
Una situación que "se ha venido haciendo con carácter general durante todo este tiempo, sin ningún tipo de problemas", ha zanjado.
"Si hay una inmensa mayoría de comunidades que han preparado todo, ¿por qué no van a cumplirlo otras?", se ha preguntado la ministra.
No ve necesario regular la objeción de conciencia
A este respecto, ha opinado que la reacción inicial de algunas comunidades fue más un "desiderátum" y una declaración política que otra cosa, porque "todos saben que están obligados por la ley y que tienen la obligación legal de ponerla en marcha y atender a las mujeres que así lo soliciten".
Respecto a la posibilidad de regular la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios que no quieran practicar abortos, Jiménez no ve hasta el momento necesidad de hacer un desarrollo reglamentario específico.
La ministra ha señalado que hay una sentencia del Tribunal Constitucional que reconoce a los médicos la objeción de conciencia con carácter particular y ha subrayado que "está perfectamente claro" que los profesionales sanitarios que quieran acogerse a esa cláusula pueden hacerlo sin problemas.
No obstante, ha precisado que, si fuera necesario, el Gobierno podría "contemplarlo tal y como dice la ley".