El grupo que tiene secuestrados a los cooperantes españoles amenaza con matar a un rehén francés
- Lo hará si en 15 días Sarkozy no satisface sus demandas
- Pide al ejecutivo galo que facilite la liberacion de presos islamistas
Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), un grupo afiliado a la red dirigida por Osama bin Laden que en la actualidad retiene a dos cooperantes españoles, le ha dado un ultimátum de quince días al Gobierno francés para que satisfaga sus demandas o de lo contrario ejecutará a un ciudadano galo que mantienen retenido.
Según la página web estadounidense SITE Intelligence Group, que recoge mensajes emitidos por grupos islamistas, AQMI ejecutará al ciudadano francés Michel Germaneau, de 78 años, que se halla en poder de este grupo desde que el pasado abril fuera capturado en el norte de Níger, a menos que el Ejecutivo galo facilite a su vez la liberación de presos islamistas.
AQMI apela directamente al presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, como responsable de la vida de Germaneau, que según el mensaje recogido por SITE podría ser ejecutado en un plazo de 15 días a partir de hoy 12 de julio.
"Los muyaidines conceden una última prórroga a Francia, que no repetirán y que no sobrepasará los quinde días a partir del 12 de julio de 2010", se podía leer en el comunicado, según la traducción de SITE.
"Cuando concluya este periodo, y si no se satisfacen nuestras demandas legítimas, Francia habrá sentenciado a muerte a su ciudadano", añadía.
No imitar al "loco" británico
El comunicado instaba a Sarkozy a que no imite a su "loco" homólogo británico, el ex primer ministro Gordon Brown, que no se plegó a las demandas de AQMI para la liberación de un ciudadano inglés, Edwin Dyer, que finalmente fue ejecutado.
Germaneu es un ingeniero retirado que durante años trabajó en Argelia en empresas petrolíferas. El pasado mes de mayo AQMI difundió imágenes y una grabación de la voz de Germaneau en la que éste afirmaba que su estado de salud era delicado, e instaba a Sarkozy a encontrar "una buena solución" para él.
AQMI es el mismo grupo que desde el 29 de noviembre de 2009 mantiene retenidos a los cooperantes españoles Roque Pascual y Albert Vilalta.
Ambos fueron secuestrados junto a otra cooperante, Alicia Gámez, cuando el convoy humanitario en el que circulaban fue asaltado en la carretara que une las localidades mauritanas de Nuadibú y Nuakchot. Sin embargo, Gámez fue puesta en libertad el pasado diez de marzo y pudo volver a España.