Condenado a muerte el asesino del matrimonio español que vivía en Marruecos

• Entró en la casa de los fallecidos para robar
• Logró escapar pero tuvo un accidente y fue detenido

El Tribunal de Apelación de Tánger ha condenado a la pena de muerte al autor confeso del asesinato, el pasado abril, de un matrimonio de españoles en Asilah, norte de Marruecos, según han informado este miércoles a la agencia EFE fuentes judiciales.

Tarek el Hauari, de 26 años, fue declarado ayer culpable de un doble asesinato en primer grado con premeditación y alevosía, además de un delito de agresión a un agente de la autoridad y otro de robo agravado y con nocturnidad.

Sin embargo, pese a que ocasionalmente se producen sentencias castigadas con la pena de muerte, Marruecos no ejecuta a un reo desde 1993, por lo que, según han señalado las fuentes, es probable que en el futuro la pena a Hauari se conmute por otra de cadena perpetua.

Un robo que terminó en asesinato

Hauari asesinó el pasado 16 de abril al matrimonio formado por Emilio Molina y María Pilar Gutiérrez después de entrar a robar en el domicilio de éstos en Asilah, a unos 45 kilómetros de Tánger.

El delincuente se vio sorprendido por la pareja sobre las 04.00 de la madrugada en su casa de la medina (ciudad antigua) de Asilah, tras lo cual comenzó un forcejeo en el que acabó degollando al hombre y asestando varias cuchilladas a la mujer.

El propio acusado reconoció, según estas fuentes, haber permanecido en la casa hasta la mañana para limpiar la sangre, hasta que, sorprendido por la llegada de la asistenta, huyó del lugar en el coche de las víctimas, con dinero, sus pasaportes y otros objetos de valor.

Pocos minutos después, el presunto homicida sufrió un accidente en el centro de la ciudad de Asilah, lo que permitió a los policías identificarlo y detenerlo.

El abogado de la familia de las víctimas, Karim Chaudri, ha anunciado a la agencia EFE que presentará una apelación para que los hechos se investiguen con más profundidad en un juicio en segunda instancia.

Pese a ello, ha asegurado que los familiares consideran que se ha hecho justicia y se muestran conformes con la decisión del tribunal.

Ésta es la segunda condena a muerte dictaminada por el Tribunal de Apelación de Tánger en una semana, después de que el martes de la semana pasada un hombre fuese sentenciado a la pena capital por haber asesinado el mes de febrero en esta misma ciudad a tres mujeres en cuya casa había entrado a robar.