Chávez dice que puede romper relaciones con Colombia en las "próximas horas"
- Ha anunciado que no asistirá a la investidura de Juan Manuel Santos
- El Gobierno de Uribe ha acusado a Chávez de ocultar a guerrilleros
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha anunciado que no asistirá a la investidura del presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos, porque debe "cuidar" por su vida, y ha advertido de que "podría romper las relaciones" con esa nación "en las próximas horas".
Chávez ha asegurado en un acto universitario que el actual presidente de Colombia, Álvaro Uribe, a quien ha llamado "mafioso", "es capaz de cualquier cosa", sugiriendo que podría ordenar atentar contra su vida.
Acusaciones por parte del Gobierno Uribe
El Gobierno de Uribe acusó en las últimas horas al de Chávez de ocultar a guerrilleros en su territorio y este viernes anunció que llevará el asunto a la Organización de Estados Americanos (OEA), por lo cual Caracas ya ha ordenado el regreso de su embajador en Bogotá.
Tras subrayar que no oculta a nadie, Chávez ha advertido: "Si siguen con sus locuras, yo en las próximas horas voy a romper las relaciones con Colombia y eso haría muchísimo más difícil" que puedan ser restituidas después de que Santos asuma, el próximo 7 de agosto.
El jefe de Estado ha sostenido que Uribe "está peleado con Santos" y que por ello "lo está saboteando".
"Hago un llamado al presidente electo (...); yo le pido que se desmarque de Uribe", ha dicho y ha recordado que había autorizado a su ministro de Exteriores, Nicolás Maduro, a reunirse con María Ángela Holguín, la futura ministra de Relaciones Exteriores de Santos.
No asistirá a la toma de posesión de Santos
Chávez ha insistido en que no asistirá a los actos de toma de posesión de Santos, con quien, pese a que "no es ningún santo de nuestra devoción", remarcó, está dispuesto a normalizar las relaciones, congeladas por decisión de Chávez de mediados del año pasado.
"No debo asistir a la posesión y lo lamento mucho", porque "Colombia es una nación hermana, sólo que ha llegado una burguesía que nos odia", ha subrayado y ha sostenido que inicialmente pensó ir para "extender la mano" a Santos y "dar una señal" hacia la normalización de las relaciones.
La "congelación" de las relaciones colombo-venezolanas obedeció a lo que Chávez ha llamado unas acusaciones "irresponsables" del Gobierno de Uribe sobre un supuesto desvío de armas de Venezuela a las FARC.
Posteriormente, en octubre del 2009, empeoró con la firma entre Bogotá y Washington de un acuerdo militar por el cual militares estadounidenses pueden utilizar al menos siete bases castrenses colombianas.