El Gobierno salva en soledad el primer trámite de los presupuestos de 2011
- El Congreso ha aprobado el techo de gasto con la abstención de CiU y CC
- Todos los grupos han rechazado las previsiones presentadas por el Ejecutivo
Tal como ocurrió con el decreto de recortes contra el déficit, el Gobierno socialista ha conseguido salvar el primer trámite parlamentario para la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2011 en absoluta soledad parlamentaria, gracias únicamente a la abstención de CiU, Coalición Canaria y UPN.
Así, la propuesta del Ejecutivo ha salido adelante en la Cámara Baja con 170 votos a favor (los 169 del PSOE y uno del diputado del PP, Antonio Vázquez, que votó así por error) y las abstenciones de CiU (10 diputados), CC (dos diputados) y UPN (un diputado), ya que PP, PNV, ERC, IU-ICV, BNG, Nafarroa Bai y UPyD sumaron 166 votos en contra, insuficientes para rechazar el proyecto.
El límite de gasto no financiero del Estado para el año próximo, que el Ejecutivo ha fijado en 122.256 millones de euros -el 7,7% menos que en 2010-, marca el montante máximo que el Gobierno podrá gastar a lo largo de 2011 y que deberá repartir entre los distintos ministerios cuando se elaboren los presupuestos partida a partida.
Soledad parlamentaria
Aunque el rechazo del techo de gasto no hubiera impedido al Gobierno presentar el proyecto de ley de los próximos presupuestos, ya que la Constitución le autoriza a hacerlo, hubiera sido una importante derrota para el Ejecutivo socialista y, sobre todo, un pésimo precedente de cara a la aprobación en otoño de las cuentas públicas.
En cualquier caso, CiU ya ha anunciado que no apoyará esos presupuestos, por lo que el Gobierno deberá buscar a lo largo de los próximos meses los apoyos que este martes no ha podido encontrar, por ejemplo, en el PNV, que se ha mostrado dispuesto a respaldar las cuentas del Estado a cambio de más autogobierno en el País Vasco.
Sea como sea, durante el debate de esta tarde todos los grupos de la oposición han criticado las previsiones del Gobierno, especialmente en el capítulo de ingresos, ya que consideran que el Ejecutivo es demasiado optimista respecto a la recuperación de la economía española.
Salgado defiende que la economía "gana fortaleza"
Pese a todas esas críticas, la vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha defendido el cuadro macroeconómico del Gobierno, que contempla que la actividad económica española aumentará el 1,3% en 2011, de forma que los ingresos fiscales subirán el 2,4%.
En este sentido, Salgado ha asegurado que el perfil de recuperación de la economía española "gana fortaleza" en 2010, recopilando toda una serie de indicadores que proporcionan "señales muy favorables", desde el consumo privado hasta "una ligera suavización de las condiciones de acceso al crédito".
No obstante, Salgado ha admitido que las medidas de austeridad aprobadas por el Ejecutivo repercutirán de forma negativa en el consumo y la inversión pública en 2011, recalcando que "la contención del déficit público se ha convertido en el objetivo más urgente y prioritario", por lo que, a su juicio, el escenario financiero planteado es "exigente y realista".
Rechazo en bloque de la oposición
Frente a la exhaustiva exposición de la ministra, el portavoz de economía del Partido Popular, Cristóbal Montoro, ha respondido que "las cifras que trae a esta Cámara no son fiables, y el Gobierno lo sabe", advirtiendo que el crecimiento puede ser de "sólo unas décimas". "Si el Gobierno ha inflado los ingresos del año próximo, entonces ha vuelto a fijar un límite de gasto muy elevado para las necesidades de la economía española", ha advertido Montoro, que también ha hecho responsables de la aprobación del límite de gasto a los grupos que se han abstenido.
El portavoz de CiU, Josep Sánchez Llibre, también ha criticado las "dificultades de cumplir estas previsiones", pero ha justificado la abstención de su grupo por "responsabilidad". "Lo que quiere CiU es que la economía española no tenga que ser intervenida por el fondo de rescate de la UE, algo que si parece el objetivo del PP", ha comentado, aunque ha recalcado que eso "no condiciona nuestra posición ante los próximos presupuestos, que ya hemos anunciado que va a ser en contra".
El mismo argumento han defendido Coalición Canaria y UPN, que han apelado al sentido de la responsabilidad para permitir la aprobación del techo de gasto, dada la situación de crisis económica, pese a no compartir las previsiones del Gobierno. Desde los partidos de izquierda (ERC, BNG e IU-ICV) se ha criticado, por el contrario, la reducción del gasto público; así, el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, ha vaticinado que los próximos presupuestos suponen "un nuevo reajuste, que va a profundizar en el crisis económica".