El Elíseo autoriza la declaración de Woerth por el caso L'Oréal mientras interrogan a su esposa
- Tendrá que explicar el contenido de unas grabaciones clandestinas
- Las cintas indican que el ministro pudo incurrir en un conflicto de intereses
- Su esposa ha sido interrogada acerca de cómo llego a trabajar para Bettencourt
El gobierno francés ha dado luz verde para que el ministro de Trabajo, Eric Woerth, declare ante la Policía como parte de la investigación por el escándalo político y empresarial desatado en torno a la fortuna de la heredera de L'Oréal, Liliane Bettencourt.
La esposa del ministro, Florence Woerth, ya ha sido interrogada acerca de cómo llegó a trabajar para una firma que administra la fortuna de la mujer más rica de Francia, después de los presuntos rumores que indican en la actuación de su marido pudo haber un conflicto de intereses.
El administrador de los bienes de la multimillonaria, Patrice de Maistre, declaró la semana pasada ante la Policía que el ministro le había pedido que se reuniera con su esposa para darle orientación profesional. Woerth, sin embargo, ha negado cualquier implicación en la contratación de su mujer quien, a raíz de este escándalo, abandonó a finales de junio su puesto en el equipo de asesores fiscales Bettencourt.
"Nunca pedí que mi mujer fuera contratada. Nunca, nunca, nunca", afirmó Woerth en una entrevista para radio Europe 1.
Grabaciones secretas
El asunto ha salido a la luz gracias a las grabaciones secretas que realizó el mayordomo de Bettencourt como prueba en una demanda por separado en el que la hija de la multimillonaria, Francois Meyers-Bettencourt, está intentando que su madre, de 87 años de edad, sea declarada mentalmente irresponsable de gestionar su fortuna.
En las cintas aparecen conversaciones entre asesores jurídicos y financieros de la heredera de L'Oréal que discuten acerca de cuentas bancarias no declaradas en Suiza y en las islas Seychelles. En una de las grabaciones, De Maistre reconoce que contrató a la esposa de Woerth para complacer al ministro.
De momento, sólo son sospechas las que planean sobre el titular de Trabajo, protagonista también de la actualidad política, ya que es el encargado de sacar adelante la controvertida reforma del sistema de pensiones, uno de los proyectos prioritarios del presidente Sarkozy, y que ha defendido este miércoles en la Comisión de Asuntos Sociales.