Serbia "nunca" reconocerá a Kosovo, que celebra el "día bendito" del aval a su independencia
- El Gobierno serbio llevará el asunto de nuevo a la Asamblea de la ONU
- Kosovo le pide que cambie su actitud y celebra el fallo de la CIJ
- EE.UU. y Rusia se mantienen en su apoyo a uno y otro bando
- La ONU pide contención a las partes y la UE evita pronunciarse
"Serbia nunca reconocerá la independencia declarada unilateralmente de Kosovo. El Gobierno considerará nuevos pasos a dar en este sentido".
Con estas palabras el presidente serbio, Boris Tadic, ha respondido al fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que asegura que esta declaración no violó el derecho internacional, una decisión que ha sido recibida con satisfacción por el Gobierno kosovar.
"Es un día bendito para la República de Kosovo y todos sus ciudadanos", ha manifestado en rueda de prensa en Pristina el presidente kosovar, Fatmir Sejdiu.
Decenas de coches tocaron la bocina en el centro de la capital kosovar y muchos ciudadanos bajaron a las calles llevando banderas de Kosovo y de Albania.
"La gente y las instituciones de Kosovo dan la bienvenida y evalúan altamente la sabia opinión del CIJ. Es una opinión explícita en favor de la declaración de la independencia", ha agregado Sejdiu.
Más aún, el presidente kosovar ha instado Tadic, "a cambiar su actitud hacia Kosovo y su dura retórica".
Serbia sigue en sus trece
Pero estas palabras ya han caído en saco roto, ya que el ministro de Exteriores serbio, Vuk Jeremic, que ha asistido en directo a la lectura del fallo, ha asegurado que no ve razón alguna por la que su Gobierno deba cambiar su postura.
"Vamos a continuar teniendo en la preservación de la soberanía y la integridad territorial de nuestro país una prioridad", ha recalcado.
Jeremic ha pasado los dos últimos años viajando por el mundo para hacer 'lobby' contra el reconocimiento de Kosovo y ha dicho que lo seguirá haciendo en el futuro.
"Estamos ante días difíciles y grandes desafíos", ha agregado Jeremic ante la prensa en La Haya, a la que ha desvelado que el próximo paso de la lucha serbia contra la independencia de Kosovo será la Asamblea General de Naciones Unidas.
La ONU pide contención
Mientras, la ONU ha pedido a las partes que eviten "toda provocación" tras el fallo, ya que podría hacer fracasar el diálogo entre las partes.
"El secretario general anima encarecidamente a las partes a entablar un diálogo constructivo, y también les insta evitar cualquier acción que se pueda considerar provocadora y descarrilar el diálogo", ha declatado el portavoz de la ONU, Martin Nesirky en una conferencia de prensa.
Además, ha explicado que Ban trasladará el contenido del fallo a la Asamblea General de la ONU, que fue el que en primera instancia solicitó la opinión del tribunal internacional sobre la legalidad de las acciones de las autoridades kosovares.
También ha indicado que queda en manos de ese foro de Naciones Unidas, en el que están representados los 192 países miembros del organismo, el adoptar cualquier acción relacionada con el dictamen de la Corte de La Haya.
Por el momento, las grandes potencias mantienen su postura sobre el conflicto. Rusia, tradicional aliado serbio, ya ha dejado claro que considera que la decisión de la Corte Internacional de Justicia no da base legal a la independencia de Kosovo.
"Consideramos que la solución del problema de Kosovo sólo es posible por medio de la reanudación de las negociaciones entre las partes interesadas", ha señalado Andréi Nesterenko, portavoz del ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
El portavoz ha insisitido en que la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU, "como refrenda la propia Corte Internacional de Justicia (CIJ), sigue siendo la mundialmente reconocida base legal internacional para el arreglo".
EE.UU. apuesta por la solución europea
En el otro lado, Estados Unidos, principal apoyo de la independencia kosovar en el extranjero, se ha felicitado por la decisión del tribunal y en un mensaje velado a Belgado ha subrayado que "es hora de que Europa se una bajo un futuro común".
"El fallo de la CIJ apoyar fuertemente que la declaración de independencia de Serbia fue legal, un juicio que apoyamos", ha subrayado P.J. Crowley, portavoz del Departamento de Estado, en un comunicado.
Subrayando la importancia de la salida europea, EE.UU. parece estar diciéndole a Belgrado que le interesa pasar página sobre este asunto para buscar una adhesión a la Unión Europea.
La alta representante de Política Exterior, Catherine Ashton, se ha felicitado por la decisión del tribunal y se ha mostrado dispuesta a "facilitar" el proceso de diálgo entre Pristina y Belgrado.
"Este diálogo debería promocionar la cooperación, conseguir progresos en el camino hacia Europa y mejorar la vida de sus gentes", ha defendido en un comunicado.
La prudencia de las palabras de Ashton se debe a que hay cinco países de la unión -entre ellos España- que no han reconocido Kosovo.
Más explícitos se han mostrado los representantes otros representantes de países europeos.
"Las conclusiones de la CIJ respaldan nuestra propia consideración acerca de la legitimidad de la declaración de independencia de Kosovo", ha afirmado el ministro de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, en un comunicado difundido por su departamento.
"La independencia de Kosovo es irreversible", ha apostillado su homólogo francés, Bernard Kouchner.