Ocho muertos en un ataque suicida frente a la casa de un ministro regional de Pakistán

• Este alto cargo es uno de los más críticos con los talibanes
• El sábado los insurgentes asesinaron a su único hijo

Al menos cinco personas han muerto en un ataque suicida perpetrado en Pabbi (Pakistán).

Ocho personas han muerto, tres de ellas policías, y otras 22 han resultado heridas en un ataque suicida registrado frente a la casa de un ministro regional del noroeste de Pakistán.

El ataque ocurrió en la localidad de Pabbi, situada en la provincia paquistaní de Khyber-Pakhtunkhwa, ante la casa del ministro de Información regional, Mian Iftikhar Hussain, crítico con los talibanes.

El suicida intentó entrar en la casa del ministro y, al ser detenido en la puerta, hizo estallar los explosivos que llevaba consigo, ha informado una televisión local.

El hijo del ministro, asesinado por los talibanes

Se da la circunstancia de que la casa del ministro estaba protegida por un fuente contingente policial tras el entierro de su hijo, asesinado el sábado pasado a manos de los talibanes.

Mian Rashid Hussain, de 27 años, fue tiroteado cuando paseaba con un amigo por la zona de Khan Sher Garhi, según relataron varios testigos presenciales.

Los talibanes reivindicaron el domingo el asesinato, condenado por las principales autoridades políticas de Pakistán, y el funeral tuvo lugar ese mismo día en Pabbi, una localidad situada a unos veinte kilómetros al este de Peshawar.

Condena del primer ministro de Pakistán

Hussain no se encontraba en la vivienda, aunque el ministro paquistaní de Interior, Rehman Malik, había estado en la ciudad poco antes para darle su condolencia por el asesinato.

El primer ministro de Pakistán, Yusuf Razá Guilani, ha condenado en un comunicado el ataque, que calificó como "cobarde" y "bárbaro", y ha afirmado que ha ordenado a las fuerzas de seguridad que aumenten la vigilancia en los lugares públicos.

Mian Iftikhar Hussein, miembro del Partido Nacional Awami (laico y pashtún) y antiguo portavoz del Gobierno provincial, es considerado el ministro regional más crítico con los insurgentes talibanes y había recibido en el pasado varias amenazas.