Los inmigrantes siguen acaparando los trabajos de menor cualificación pese al paro
- Los españoles no les sustituyen en los puestos de menor categoría con la crisis
- Su paro casi dobla el de los nacionales, según el Observatorio de la Inmigración
Los inmigrantes siguen acaparando los trabajos de menor cualificación del mercado laboral español, sin que los trabajadores nacionales les estén sustituyendo en esos puestos a pesar de la crisis, que además ha afectado en mayor medida a los trabajadores foráneos: en 2009, registraron una tasa de paro que casi dobló a la de los españoles.
Así se refleja en el informe Inmigración y mercado de trabajo 2010, elaborado por el Observatorio Permanente de la Inmigración -dependiente del Ministerio de Trabajo e Inmigración- y que analiza la situación de los colectivos inmigrantes en el mercado de trabajo.
Según los datos recogidos en este estudio, el desempleo afectó de forma mucho más acusada al colectivo inmigrante durante al año pasado, ya que, si bien la tasa de paro fue del 18,8% para el conjunto de la población, entre los españoles fue del 16,8%, mientras que para los extranjeros fue del 29,7%.
Los hombres extranjeros fueron los más afectados -con una tasa del 33,1%, frente al 25,5% de las mujeres extranjeras-, sobre todo los afiliados al régimen general y autónomos, aunque los trabajadores extranjeros aumentaron su filiación en el régimen agrario y el de empleados de hogar.
Las consecuencias de la crisis también se dejaron ver en el número de afiliados a la Seguridad Social, puesto que los extranjeros perdieron el 11,2% en el régimen de autónomos -frente al 4,1% de los españoles- y el 8,4% en el régimen general -por el 3,8% de los españoles-, mientras que creció el régimen agrario, de forma que si a finales de 2008 era el 10,8% del total de los extranjeros en 2009 ascendió al 14,4, con presencia sobre todo de rumanos y búlgaros.
Menor proporción de empleo sumergido
Por colectivos, el más dañado por el desempleo el pasado año fue el ecuatoriano, que perdió la cuarta parte de sus ocupados, seguido del rumano y marroquí.
Según el informe, el análisis de los datos indica que la pérdida de empleo se ha dado tanto en el reglado como en el sumergido y que existe menor proporción de empleo sumergido.
El sector de la construcción continuó concentrando fuertes pérdidas de empleo (154.700), junto a industria (89.200) y servicios (84.300), pero los extranjeros siguen concentrados en las categorías bajas, ya que la denominada "trabajadores no cualificados" agrupa al 11% de los trabajadores españoles y en el caso de los extranjeros este porcentaje sube al 35,9%.
El informe señala que no se ha producido sustitución de trabajadores españoles por extranjeros, ya que en casi todas las ocupaciones en las que los españoles pierden ocupados, también los pierden los extranjeros.
Entre las conclusiones se destaca que en los próximos años se avanzará hacia un mercado laboral que requerirá de mano de obra cada vez más formada y seguirá habiendo ocupaciones que requerirán captación de trabajadores extranjeros, por lo que en el estudio se calcula que se mantendrá estable la cifra de un 15% de trabajadores extranjeros en el mercado laboral.