La ONU: la medida francesa de retirar la nacionalidad a ciertos extranjeros "incita al odio"
- 60 campamentos gitanos han sido desmantelados en 15 días
- Han sido expulsados a Bulgaria y Rumanía
La propuesta del presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, de retirar la nacionalidad francesa en casos determinados constituye "una incitación al odio", según ha denunciado este jueves el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación Racial.
Este comité examinó el miércoles y este jueves el informe de la delegación francesa sobre las medidas de las disposiciones de la Convención internacional para eliminar toda forma de discriminación racial, después de que expertos de la ONU denunciasen un "recrudecimiento" de los actos racistas en Francia.
"Discriminación contra franceses de origen extranjero"
"Falta una verdadera voluntad política", ha asegurado el relator del comité para el examen al informe de Francia, Pierre-Richard Prosper.
El representante permanente de Francia ante las Naciones Unidas en Ginebra, Jacques Pellet, ha respondido a las críticas y ha reconocido que las personas de etnia gitana, la mayoría rumanos, se enfrentan a importantes dificultades en los ámbitos económicos y sociales.
Los 18 expertos que integran ese comité mostraron también su preocupación por la situación de los gitanos y su expulsión a Bulgaria y Rumanía, además de incidir en el debate sobre la "identidad nacional".
Para el Comité, estas decisiones y el planteamiento de Sarkozy de retirar la nacionalidad francesa en casos puntuales representan "no sólo una discriminación contra franceses de origen extranjero", sino también "una incitación al odio", según un miembro de este comité.
Del mismo modo, la política contra la discriminación en Francia fue recriminada por la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), cuyo vicepresidente, Malik Salemkour, ha lamentado este jueves en rueda de prensa que "la lucha contra el racismo ya no es una prioridad".
"Las administraciones prefieren el populismo a combatir el racismo", ha subrayado Salemkour, y ha añadido que "estigmatizar al extranjero constituye una tendencia que se ha acelerado con Sarkozy".
"Ha habido una regresión jurídica en este apartado durante los últimos años", precisó el vicepresidente de la FIDH, ya que "se elaboran estadísticas en las que se pregunta por el lugar de origen", por lo que "la etnia está presente en la política de seguridad", ha argumentado.
Salemkour ha resaltado que en la reunión del comité, la delegación francesa sólo se ha comprometido a elaborar a una futura ley contra el racismo, sin concretar más.
Desmantelamiento de campamentos gitanos
Mientras, al margen de toda esta polémica, Francia ha desmantelado en 15 días 60 campamentos gitanos. La última tanda de ellos, según recoge Le Monde, este mismo jueves, en el que al menos había una veintena de niños.
Esta información ha sido confirmada por el ministro francés del Interior, Brice Hortefeux.
En total son 700 las personas que se han visto afectadas y que, según el ministro, serán expulsadas a sus países de origen "de aquí a finales de mes".
Durante una rueda de prensa en Lyon, Hortefeux ha explicado que se fletarán vuelos específicos para devolver a todas las personas expulsadas a Bulgaria y Rumanía.
El desmantelamiento de los campamentos ilegales de gitanos y poblaciones nómadas fue anunciado el pasado 28 de julio por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, quien entonces dio órdenes a su Gobierno para la evacuación de la mitad de las 300 instalaciones de ese tipo que existen en Francia en un plazo de tres meses.
Hortefeux ha hecho balance de lo realizado hasta ahora y ha anunciado que la próxima semana se reunirá con dos miembros del Gobierno rumano para abordar la cooperación entre los dos países en este ámbito.