Trabajo cree que puede haber "delito penal" en el trato de la dirección de Marsans a sus trabajadores
- Las irregularidades competen sobre todo a los dueños anteriores, Díaz Ferrán y Pascual
- La inspección se ha realizado sobre lo ocurrido hasta junio, mes de venta del grupo
- Se han detectado dos infracciones muy graves y tres graves
El Ministerio de Trabajo cree que puede haber "delito penal" en el trato dado por la dirección de Marsans a los trabajadores de la agencia de viajes, según aparece en la respuesta que ha dado el departamento dirigido por Celestino Corbacho a la reclamación interpuesta por el interpuesta por el sector ferroviario y servicios turísticos de la Federación de Transportes, Comunicaciones y Mar de UGT, en representación de los trabajadores del grupo empresarial.
De esta forma, el ministerio ha paralizado el procedimiento sancionador derivado de la inspección laboral a la que ha sometido al Grupo Marsans, y ha remitido a la Fiscalía las actuaciones por considerar que las infracciones cometidas por la dirección de la empresa "pueden ser constitutivas de ilícito penal".
Marsans pertenece a Possibilitum Business desde que esta sociedad la compró por 600 millones de euros en junio pasado a sus anteriores propietarios, el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y Gonzalo Pascual.
Por tanto, las infracciones afectarían tanto a la anterior dirección, encabezada por Díaz Ferrán y Pascual, como a los actuales dueños, ya que la inspección refleja irregularidades cometidas hasta junio de 2010, mes en que se realizó la venta.
"Apropiación indebida de cuotas de los trabajadores"
La inspección ordenada por Trabajo concluye que la dirección de Marsans ha incumplido varios artículos del Estatuto de los Trabajadores, la Ley General de la Seguridad Social y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, lo que constituyen tres infracciones graves y dos muy graves tipificadas en la normativa del Orden Social.
En concreto, asegura que no ha ingresado las cuotas de la Seguridad Social de sus trabajadores, "pese a haberse reducido el abono de sus retribuciones", por lo que Trabajo afirma que "la jurisprudencia imputa este ilícito penal a las conductas empresariales, por apropiación indebida de las cuotas de los trabajadores retenidas y no ingresadas".
Además, cree que el personal de Marsans ha sufrido "falta de ocupación efectiva" y un "atraso reiterado y falta de puntualidad" en el cobro de sus salarios, y también considera que la dirección de la empresa "no mantiene en adecuadas condiciones de limpieza los centros de trabajo".
Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, "responsables máximos" del cierre
"Del conjunto de las conductas seguidas por la dirección de las empresas del grupo se entiende que se puede haber incurrido en conductas ilícitas penales tipificadas en el Código Penal", asegura la respuesta de Trabajo.
Al conocer la respuesta del Ministerio, UGT ha emitido un comunicado donde asegura que la integridad en la gestión de los anteriores dueños del Grupo Marsans, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual -a los que califica de "responsables máximos" del cierre de la empresa-, "está ahora más que nunca en tela de juicio" tras la contestación de la Inspección de Trabajo.