Tres activistas españolas denuncian agresiones de la Gendarmería marroquí en El Aaiún
- Dos activistas aragonesas y una catalana denuncian que permanecen asedidas
- Pertenecen a una asociación aragonesa pro-saharaui
Las activistas aragonesas Emma Pomar y Pilar Fortuño, junto con la catalana Isabel Terraza y el mejicano Antonio Velásquez, permanecen asediadas por la Gendarmería marroquí en la ciudad saharaui de El Aaiún, después de haber sido golpeadas por agentes policiales y militares esta madrugada, según ha explicado Fortuño.
La asociación a la que pertenecen, que agrupa a los ciudadanos saharauis afincados en Aragón y numerosos aragoneses, también ha hablado por teléfono con Pilar Fortuño, según ha indicado el miembro de Um Draiga Enrique Gómez.
En declaraciones a Europa Press, Pilar Fortuño ha explicado que la comitiva internacional viajó a El Aaiún para recibir a un grupo de cinco activistas saharauis que volaron en avión desde Argelia.
Según Fortuño, la vivienda en la que esperaban la llegada de los activistas permaneció el domingo desde seis horas antes rodeada por numerosos agentes policiales uniformados y de paisano. Cuando llegaron los activistas, los agentes cargaron violentamente contra los presentes. "Nos dieron puñetazos, nos tiraron al suelo, nos dieron patadas, nos escupieron".
Lesiones
Una persona saharaui tuvo que acudir de urgencia al hospital por lesiones en el cuello que le han obligado a utilizar un collarín, mientras que la madre de uno de los homenajeados fue atendida por una crisis nerviosa.
Fortuño tiene marcas de golpes en los brazos y arañazos, entre otras lesiones. Pomar también tiene lesiones. "No nos hemos atrevido a salir de la casa hasta hoy por la mañana", ya que "la calles están sitiadas" alrededor de la vivienda, según relata.
También anoche, los ciudadanos saharauis que intentaron acceder a la vivienda para celebrar la llegada de los cinco activistas no pudieron hacerlo al impedírselo violentamente la Gendarmería, tras lo cual se manifestaron por el barrio de Magdala, en un acto que fue duramente reprimido por la Policía marroquí.
De madrugada, y tras haber sufrido la agresión, las tres ciudadanas españolas llamaron al Consulado en El Aaiún, donde un funcionario afirmó que estos hechos "ocurren todos los días", según ha relatado Fortuño. Posteriormente, intentaron infructuosamente ponerse en contacto con la embajada en Rabat.
Pilar Fortuño ha aludido a la visita del ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, a Rabat para zanjar la disputa mantenida entre ciudadanos marroquíes y agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en la frontera de Melilla y los insultos vertidos durante semanas a las mujeres agentes. Ha recordado que "no es la primera vez que --los gendarmes marroquíes-- pegan a ciudadanos españoles" en el Sáhara.