El barrio londinense de Notting Hill celebra su diversidad cultural en su famoso carnaval
Inmigrantes afrocaribe
Miles de londinenses y turistas despiden el verano este fin de semana para celebrar el espíritu tolerante y multicultural de la ciudad. Calipso, soca (fusión de soul y calipso), reggae o samba son algunos de los ritmos que suenan en los grandes altavoces de los camiones. El carnaval celebra este lunes su día grande con casi 10 horas ininterrumpidas de pasacalles.
Medio centenar de equipos gigantes de música, grupos carnavalescos con más de 300 miembros y un millón de asistentes cada año convierten a este carnaval en el más multitudinario de Europa. Junto al mercadillo de Portobello Road, este pasacalles se ha consolidado como uno de los grandes atractivos del conocido barrio de Notting Hill.
No al racismo
Este carnaval fue creado por inmigrantes afrocaribeños en 1996 como respuesta a la oleada de incidentes racistas. Hoy en día, mantiene el tinte reivindicativo y festivo uniendo a londinenses, turistas y caribeños al son de la música.
Los últimos coletazos de sol permiten disfrutar de esta fiesta al aire libre. Lentejuelas, purpurina y plumas son algunos de los materiales que confeccionan los trajes de los asistentes.
Puestos de comida caribeña, china, italiana y el tradicional "fish and chips" salpican el recorrido de los grupos carnavalesco y hacen patente la diversidad cultural de Londres.
Seguridad garantizada
Londres ha invertido más de 7 millones de euros para garantizar la seguridad en una fiesta en la que participan un millón de personas. El año pasado, más de 200 personas fueron detenidas por desórdenes públicos y posesión de drogas. En los días previos a esta edición, la policía ha realizado un centenar de detenciones por posesión de armas.
Para prevenir la entrada de armas se han instalado controles policiales en los accesos al barrio de Notting Hill. Además cientos de policías de paisano vigilarán la acción de los carteristas.