Tercera remodelación del Gobierno en dos años
- La salida de Corbacho supone la séptima reforma desde que llegó Zapatero
- Junto a él, es posible que abandonen sus carteras Jiménez y Moratinos
- El motivo esta vez son las candidaturas para las elecciones locales y regionales
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se enfrenta a su tercera remodelación en sólo dos años. En esta ocasión el motivo es la celebración de las próximas elecciones locales y autonómicas, para las que el PSOE cuenta con miembros de su Ejecutivo como candidatos, como el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, o la tituar de Sanidad, Trinidad Jiménez.
Corbacho, según ha confirmado este viernes el PSC, abandonará su cargo tras la huelga general del 29 de septiembre para incorporarse a las listas que encabeza el presidente de la Generalitat, José Montilla. Lo más probable es que ocupe el número tres.
La salida de Jiménez, en cambio, no es segura todavía, pues para concurrir a las elecciones como rival de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid, primero debe vencer a Tomás Gómez en las primarias.
Queda pendiente además otra posible modificación en el Gabinete de Gobierno, pues se baraja la candidatura del titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para la alcaldía de Córdoba.
Siete remodelaciones desde 2004
La remodelación del Gobierno será la tercera de esta legislatura, después de la entrada en el Ejecutivo, en febrero de 2009, de Francisco Caamaño en sustitución de Mariano Fernández Bermejo y de la incorporación, en abril de 2009, de cinco nuevas caras al Gabinete de Zapatero: Manuel Chaves, José Blanco, Ángeles González-Sinde, Trinidad Jiménez y Ángel Gabilondo.
A ellas se unió el nombramiento de Elena Salgado, hasta entonces ministra de Administraciones Públicas, como vicepresidenta económica.
Desde la llegada a La Moncloa de José Luis Rodríguez Zapatero, en marzo de 2004, se han producido siete remodelaciones dentro del equipo que cada viernes se sienta en el Consejo de Ministros, por el que han pasado hasta ahora 34 personas.
Siguiendo los pasos de otros ministros
Corbacho no será el primer ministro que abandona el Gobierno para luchar en el ruedo de la política autonómica y seguramente tampoco el último.
Esperanza Aguirre, ex presidenta del Senado, es uno de los ejemplos de cómo se puede triunfar en la política autonómica después de haber ocupado una silla en el Consejo de Ministros, además de en la Cámara Alta.
José Montilla puede presumir también, junto a Aguirre, de presidir una comunidad tras ser miembro de un Gobierno en Madrid.
Pero el haber sido ministro no es garantía de triunfo cuando hay que enfrentarse a una campaña electoral como cabeza de lista.
Es el caso de los ex ministros del PP Josep Piqué o Jaime Mayor Oreja o el socialista Juan Fernando López Aguilar, quienes no lograron el objetivo de presidir sus respectivas comunidades autónomas.
También hay ejemplos de "ida y vuelta", como el de Manuel Chaves, que fue ministro de Trabajo con Felipe González, gobernó Andalucía durante 19 años y volvió al Gobierno en abril del pasado año para ocupar la vicepresidencia tercera.
En el PP, Jaume Matas también hizo este doble viaje, en este caso de Madrid a Baleares, comunidad que gobernó antes de formar parte del Gobierno de José María Aznar, que dejó en marzo de 2003 para regresar a la Presidencia autonómica, previo paso por las urnas.