España va "muy adelantada" en la cobertura de financiación de sus necesidades fiscales
- Fitch alaba los ajustes fiscales de España, Grecia, Portugal e Irlanda
- La agencia pronostica que bancos y Estados necesitarán más financiación
España va "muy adelantada" con respecto a otros países de la zona del euro al haber financiado ya, a mediados de año, entre dos tercios y tres cuartos de sus requerimientos de financiación fiscal para el 2010, según la agencia Fitch.
"Mientras que todos los Estados miembros (de la UE) están respondiendo en diversa medida a la necesidad de implementar programas creíbles de consolidación fiscal a medio plazo, sólo Grecia, España, Portugal e Irlanda han acometido un ajuste fiscal substantivo", ha puntualizado Paul Rakins, de Fitch.
La mayoría de los países de la eurozona habían financiado ya en junio más del 50% de sus exigencias de financiación fiscal, ha explicado la agencia de rating.
España, con perspectiva AA+ (estable), Irlanda, AA- (casi estable), Portugal, AA- (negativa) y Grecia, BBB- (bastante negativa) son los cuatro países destacados por la agencia de calificación por haberse adelantado al resto.
Pese a todo, la agencia considera que la crisis financiera mundial ha puesto de manifiesto la necesidad de introducir cambios profundos en la conducta de la política fiscal y económica a nivel tanto nacional como europeo para disipar las dudas sobre la viabilidad y el éxito a largo plazo de la unión económica y monetaria europea.
Una aparente tranquilidad de los mercados
Fitch ha señalado que "el anuncio de la red de seguridad para la deuda soberana de la zona del euro y los resultados del test de resistencia de la banca europea han tranquilizado a los mercados, a lo que también ha contribuido un crecimiento superior al esperado en el segundo trimestre".
“La confianza del mercado sigue siendo frágil“
Pero, según la agencia de calificación de riesgo, la confianza del mercado sigue siendo frágil al persistir las dudas sobre la recuperación económica global y la perspectiva a medio plazo de las finanzas públicas.
La agencia cree que la volatilidad registrada en la deuda soberana y otros mercados ha sido tanto una crisis de confianza del mercado en la viabilidad a largo plazo de la zona del euro como en la propia solvencia fiscal de algunos estados miembros.
Aumentarán las necesidades de financiación
En su informe, Fitch también ha destacado la convergencia del riesgo de crédito bancario y de la deuda soberana en la primera mitad de este año, que ha restringido, en algunos casos, el acceso de ambos a los mercados internacionales de capital.
Mientras que los tests de resistencia han aminorado la preocupación de los inversores con respecto a la necesidad que pueden tener los bancos de recurrir al Estado, se espera que bancos y Estados compitan de modo creciente en los mercados de capitales.
Ello se explica por la coincidencia temporal que va a producirse entre un incremento de las necesidades de financiación fiscal de los Estados y de los vencimientos de las deudas bancarias en los dos próximos años.
Fitch calcula las necesidades combinadas para los bancos y los Estados de la zona del euro en 455.000 millones de euros en la segunda mitad de este año y de entre 900.000 millones y un billón de euros anuales en 2011 y 2012.
A pesar de los actuales problemas de la zona del euro, Fitch ha considerado que, para países con economías muy vinculadas al euro y con finanzas públicas sanas como es Estonia, los beneficios de unirse a la moneda única superan a eventuales desventajas.