Un rumor sobre la quema de coranes desata las peores protestas desde junio en Cachemira
- Al menos han muerto 17 personas y 70 han resultado heridas
- En los últimos 3 meses al menos se han sucedido las manifestaciones
- La región se encuentra bajo el toque de queda
Los rumores de que una copia del Corán había sido profanada en EE.UU. han alterado aún más los ánimos en el valle de Cachemira, donde este lunes se ha vivido la jornada más violenta -con al menos 17 muertos- desde que comenzó la actual ola de protestas contra la India, el pasado mes de junio.
Según fuentes oficiales citadas por la agencia PTI, al menos 17 personas, entre ellas un policía, han muertoa y 70 han resultado heridas durante varias manifestaciones y choques con las fuerzas de seguridad en todo el valle de Cachemira, musulmán bajo soberanía india.
El origen de las protestas, un rumor
Una de las protestas, que ha dejado al menos cinco muertos en Tangmarg (norte cachemir), ha sido motivada por los rumores de que se había quemado una copia del Corán en EEUU, según el plan que tenía un pastor protestante radical estadounidense, que finalmente no llevó adelante.
Los manifestantes prendieron fuego a una escuela cristiana y a varios edificios y residencias oficiales, tras lo cual protagonizaron un choque con la Policía, que abrió fuego contra ellos.
"Son protestas absolutamente proislámicas y pedimos castigos adecuados para aquellos que han profanado el sagrado Corán", ha declarado a IANS un lugareño de 55 años, Manzoor Ahmad.
En un comunicado, el embajador estadounidense en Delhi, Timothy J. Roemer, ha precisado que algunos medios han informado de que el pasado 11 de septiembre "un individuo desinformado de EEUU profanó el sagrado Corán arrancándole algunas páginas".
"Condeno estos actos como irrespetuosos, intolerantes, desintegradores y no representativos de los valores norteamericanos", ha aseverado.
"También estamos consternados al ver informaciones de que una escuela y una iglesia en Cachemira y en Punjab (estado vecino) han sido atacadas y destruidas por alborotadores", ha manifestado.
Durante la jornada se registraron muchas otras protestas con víctimas en otros puntos del valle como Badgam, Pampore, Bandipora y Charar-e-Sharif.
Todo ello pese al toque de queda impuesto este fin de semana y ampliado este lunes por las autoridades indias ante el brote de violencia tras las oraciones del Eid, festividad que marca el fin del Ramadán.
Una fuente policial dijo a IANS que el toque de queda continuará vigente tanto en Srinagar como en otros importantes núcleos urbanos al norte y al sur de esa ciudad, capital estival de la Cachemira india.
Aunque las fuentes oficiales indias insistieron en que los manifestantes expresaron su repulsa por la profanación del Corán tras informaciones al respecto difundidas por una televisión iraní -cuya transmisión fue después bloqueada-, las protestas son constantes desde junio y tienen como principales proclamas la independencia y la retirada de las fuerzas de seguridad indias.
Protestas contra el gobierno interno
Decenas de civiles han muerto desde entonces y los analistas empiezan a comparar la situación con el final de la década de 1980, cuando a la efervescencia social se unió el auge de grupos separatistas o propaquistaníes armados.
El conflicto sigue enquistado y el primer ministro indio, Manmohan Singh, ha mostrado este lunes su preocupación y ha subrayado que las demandas de los cachemires deben ser abordadas.
"Estamos dispuestos a hablar con toda persona o grupo que abjure de la violencia, en el marco de nuestra Constitución", ha declarado Singh durante una conferencia de Defensa.
Horas después, un grupo de ministros -entre ellos los de Interior, Defensa y Exteriores- encabezados por Singh se reunieron para estudiar las posibles modificaciones a una ley que da poderes especiales a las Fuerzas Armadas indias en estados conflictivos como Cachemira y otros del aislado noreste.
Según PTI, que no citó a sus fuentes, en concreto se estudió aprobar un paquete de indemnizaciones para las víctimas y retirar de algunos distritos los poderes especiales de las fuerzas de seguridad, que actúan frecuentemente con impunidad.
Finalmente no se ha tomado ninguna decisión y se convocó una reunión de todas las fuerzas políticas para el próximo miércoles.