La Comisión Electoral de Birmania disuelve el partido de Suu Kyi, bajo arresto domiciliario

• Otras nueve formaciones políticas han sido disueltas
• Se ha comunicado por radio y televisión sin dar más detalles

La Comisión Electoral de Birmania ha anunciado este martes, a través de la radio y la televisión, que finalmente procederá a la disolución del partido de Aung San Suu Kyi, la Liga Nacional para la Democracia (LND), y otras nueve formaciones políticas.

Pero el conflicto no es nuevo. La LND había rehusado registrarse en la citada comisión durante un acto de condena de la Constitución de 2008 y la legislación electoral aprobadas por la Junta Militar para organizar las elecciones del próximo 7 de noviembre. Una cita electoral para la que Suu Kyi, Nobel de la Paz en 1991 y bajo arresto domiciliario, ha pedido que se proceda al boicot.

Un futuro incierto para las elecciones

Entre los partidos disueltos se encuentran cinco agrupaciones que habían sido aceptadas previamente, por lo que el número de formaciones políticas autorizadas a concurrir a las elecciones queda reducido a 37.

La Comisión Electoral todavía debe informar de cuándo arrancará la campaña electoral y cuáles son los candidatos que han pasado el escrutinio y son elegibles a ocupar alguno de los 1.163 escaños de los futuros parlamentos nacional y regionales.

Birmania está gobernada por militares desde el golpe de Estado del general Ne Win en 1962 y el país no celebra elecciones parlamentarias desde 1990, cuando Suu Kyi y la LND derrotaron con 392 diputados al partido oficial, que sacó diez congresistas.

La Junta Militar nunca reconoció aquella derrota, anuló este año el resultado y ha tenido a Suu Kyi bajo arresto domiciliario 14 de los últimos 21 años.

Escepticismo internacional

Esta medida, en cierto modo no sorprende y ya se esperaba. De hecho, el Departamento de Estado norteamericano aseguraba que las elecciones parlamentarias fijadas por los generales birmanos no serían "creíbles a la luz de la atmósfera de represión política" que existe en el país.

"Dado el clima de represión política en Birmania, estas elecciones no va a existir realmente", sentnciaba nada más conocerse la cita electoral el portavoz del Departamento de Estado Philip Crowley.