Detienen en Valencia a dos sicarios colombianos acusados de más de 200 crímenes en su país
- Se habían asentado en España para establecer oficinas de cobro
- Se les imputan decenas de asesinatos, secuestros y torturas
- Han sido enviados a prisión a la espera de ser extraditados
La Policía Nacional ha detenido a dos sicarios relacionados con más de 200 asesinatos selectivos, secuestros y torturas en Colombia. 'Ronco' y 'Pollo', los detenidos, se habían asentado en España con la intención de continuar con sus actividades, ocultaban su identidad e incluso uno de ellos había alterado sus huellas dactilares
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha decretado prisión provisional para los dos sicarios, a la espera de que Colombia remita, en un plazo de 40 días, la documentación necesaria para formalizar la demanda de extradición por los delitos de homicidio agravado, tráfico de armas, secuestro, tortura y tráfico de sustancias estupefacientes y que, en última instancia, tendrá que aprobar el Consejo de Ministros.
Los dos detenidos formaban parte de "oficinas de cobros" a sueldo de cárteles de la droga y se habían asentado en España con la intención de continuar con sus actividades. Estos asesinos fueron localizados y arrestados en la localidad valenciana de La Eliana y en Valencia capital.
Los investigadores pudieron comprobar que a raíz de la desmovilización de las "Autodefensas Unidas de Colombia", varios integrantes de ese colectivo -condenados por su participación en asesinatos y tráfico de drogas- habían huido de la justicia colombiana.
Querían establecer 'oficinas de cobros'
Se habrían asentado en diferentes países europeos, con la finalidad de establecer "oficinas de cobros". Estas organizaciones actúan vinculadas a cárteles de la droga colombianos y se dedican a la ejecución de actividades de sicariato, entre ellas la comisión de asesinatos selectivos, extorsiones y secuestros.
El primero de ellos, Mauricio Alberto González Sepúlveda, alias 'Ronco', de 44 años, figura en la lista de los más buscados del cártel de Envigado. Fue uno de los líderes del 'Bloque Héroes de Granada' de las 'Autodefensas Unidas de Colombia'. Tras los acuerdos para la desmovilización del citado grupo, 'Ronco' no cumplió con el proceso dentro de la aplicación de la ley de Justicia y Paz y continuó como líder de la "oficina de cobros" 'La Unión'.
El segundo detenido, Henry Norberto Valdés Marín, alias 'Pollo', de 36 años, actuaba como jefe logístico de la "oficina de cobros" de 'Las Tres Puntillas' o 'La Negra', vinculada con el Cartel del Norte del Valle. 'La Negra' presta sus servicios criminales al mejor postor y dispone de un grupo de sicarios que se desplaza con frecuencia al exterior a ejecutar actos criminales. Operan en 8 países y se le atribuye, al menos, la comisión de 200 asesinatos en Colombia.
Dichos crímenes eran peculiarmente perpetrados a fin de que se conociera que eran obras suyas. Ataban y amordazaban a las víctimas, les encintaban la cabeza y les asesinaban para posteriormente clavarles tres puntillas en la cabeza.
Entre los más de 200 asesinatos se encuentran el del futbolista Albeiro "El Palomo" Usuriaga en febrero del 2004, crimen que fue cometido en un humilde barrio por un muchacho de unos 15 años; también la muerte de dos agentes de inteligencia del DAS y de la Policía; o la de una mujer, cuyo cuerpo fue encontrado entre una maleta abandonada cerca del zoológico de Cali.
Boda fraudulenta con una española
'Ronco' fue detenido en la localidad valenciana de La Eliana. Había contraído matrimonio de forma fraudulenta con una ciudadana española, con la finalidad de obtener un permiso de residencia y posteriormente la nacionalidad española.
Para evitar su localización facilitaba datos de empadronamiento falsos. Las autoridades colombianas le reclamaban por los delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir con fines de homicidio, porte ilegal de armas, secuestro, tortura, tráfico fabricación o porte de sustancias estupefacientes.
'Pollo' ha sido detenido en Valencia. También para intentar impedir su identificación, los agentes han comprobado que se había alterado las huellas dactilares. Era reclamado por delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir con fines de cometer homicidio, secuestro extorsivo y porte ilegal de armas.
La operación ha sido desarrollada por agentes de la UDYCO Central de la Comisaría General de Policía Judicial y de la policía colombiana, con el apoyo de agentes de la Jefatura Superior de Policía de Valencia y ha contado con la colaboración de la policía colombiana.