Una fuerte tormenta de agua y granizo colapsa Cáceres y la lluvia causa problemas en Madrid
- Las riadas han arrastrado medio centenar de vehículos en Cáceres
- El caudal ha llegado a subir más de dos metros en algunas zonas
- El Ayuntamiento y la Junta abren oficinas para atender a afectados
- En Madrid, el Servicio de Emergencias ha gestionado 250 avisos
La ciudad de Cáceres va recuperando la normalidad tras la fuerte tromba de agua y granizo que cayó la noche del jueves, que colapsó la ciudad y que ha causado cuantiosos daños materiales, sobre todo en los barrios de San Blas y Aguas Vivas, donde aún se ven toneladas de granizo.
El servicio de bomberos, según fuentes municipales, continúa realizando salidas para ayudar a los afectados por las inundaciones de viviendas y garajes. Además, los techos de algunas casas presentan peligro de derrumbe por el peso del granizo.
La extremeña es una de las 23 provincias que están este viernes en alerta por riesgo de lluvias.
Otra de las más afectadas esta madrugada por las tormentas ha sido Madrid. El Servicio de Emergencias 112 ha gestionado la pasada noche unos 266 avisos de emergencia.
La lluvia, aunque no ha provocado daños personales ni materiales de consideración, sí ha obligado a los bomberos a efectuar 100 salidas.
La Policía de Cáceres, desbordada
La Policía Local ha contabilizado hasta ahora medio centenar de vehículos que debido a la fuerza de arrastre del agua comenzaron a flotar, y acabar incrustados algunos de ellos contra el mobiliario urbano. En alguna de las calles, como Narciso Puig Mejías, el caudal llegó a subir más de dos metros.
La alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, ha señalado que la propia Policía Local se sintió "desbordada" ante el incesante número de llamadas a su centralita.
La alcaldesa ha explicado que la fuerte granizada caída, desde las 20:30 horas hasta cerca de las 21:00 del pasado jueves, a la que siguió una fuerte lluvia, propició que los desagües no pudieran aliviar el agua acumulada.
Inmuebles dañados en Cáceres
El viento y el granizo partió multitud de árboles, volcó contenedores e incluso levantó el asfalto en algunas calles, aunque los peores momentos se vivieron en la calle Narciso Puig Mejías y en el Crematorio, donde el corte del suministro eléctrico imposibilitó que se terminase la incineración de un cadáver.
Heras también subrayó que vecinos del casco histórico, "al tratarse de inmuebles viejos", precisan la ayudas de bomberos e incluso la parte superior del Ayuntamiento se ha visto afectada por el temporal, quedando dañada el área de Turismo.
En cualquier caso argumenta que lo más importante "es que no hay que lamentar ninguna desgracia personal", y que todo el esfuerzo de los distintos colectivos se centra en recuperar el funcionamiento de los semáforos y en aliviar el agua que ha inundado numerosas viviendas.
Visita de Fernández Vara
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que ha visitado esta mañana el barrio de Aguas Vivas, ha indicado que agentes de la policía local y de los bomberos que no estaban de servicio se han incorporado a las tareas en la ciudad para ayudar a los vecinos.
Fernández Vara se ha mostrado preocupado por los cuantiosos daños materiales registrados por la tromba de agua y granizo y ha opinado que si la hubiera descargado a otra hora, no se sabe "lo que habría podido ocurrir".
El presidente del Ejecutivo extremeño ha pedido a las aseguradoras que "arrimen el hombro, porque ahora es el momento de estar al pie del cañón".
El Ayuntamiento de Cáceres, a través de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), y la Junta de Extremadura, a través de la Consejería de Fomento, han habilitados despachos para atender a los damnificados por la tromba de agua y granizo que anoche en la ciudad.
Complicaciones en Madrid
La portavoz de Emergencias 122 Comunidad de Madrid, Pilar Rodríguez, aseveró que la tormenta caída entre las 01:30 y las 03:30 horas entró por la zona suroeste de la Comunidad, donde afectó a municipios como Griñón, Parla, Fuenlabrada o Getafe, y salió por la zona noreste, con mayor incidencia en las localidades de Rivas o Alcalá de Henares.
La lluvia provocó alrededor de 266 llamadas de emergencias, algunas de ellas también procedentes de Madrid capital, y 100 salidas de los bomberos de la Comunidad de Madrid, la mayoría de ellas para eliminar balsas de agua y achicar agua en garajes y sótanos.