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Manuela Velasco se estrena en el teatro de la mano de Arthur Miller

  • Está en el Teatro Español con Todos eran mis hijos
  • La joven actriz comparte tablas con Carlos Hipólito, Gloria Muñoz y Fran Perea

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Inquieta historiadora de vocación, curiosa e incisiva, soñadora de profesión, Manuela Velasco es, además de creíble como intérprete, de esas personas capaces de contagiar su entusiasmo por algo, ya sea Arthur Miller (de quien está leyendo su biografía), la gira que se avecina y con la que podrá conocer teatros de todo el país o la posibilidad de pasear por los mismos rincones y pasillos que pisó Federico García Lorca.

Cada día llega al trabajo en el Teatro Español con la ilusión de conocer algo más de Ann Deever, su personaje en Todos eran mis hijos: no es difícil para ella emocionarse, ya que se sube por primera vez a las tablas y se muestra feliz por  haber ido acumulando, desde la primera lectura del texto, detalles, recuerdos y sensaciones.

Ganadora de un Goya por su Ángela de [Rec], vista en Venecia con la segunda entrega, también dirigida por Paco Plaza y Jaume Balagueró, y en series de televisión como Cuéntame, La chica de ayer y Doctor Mateo, la madrileña está entregada casi en exclusiva a su aventura teatral: hasta el 31 de octubre no se moverá de Madrid y luego toca un extenso e intenso paseo por todo el país para mostrar que todas las familias, la de los Keller incluida, encierran algún secreto.

Absorbida por su personaje, al que mima y acompaña en todo momento, sabe que dentro de poco tendrá que vivir "sólo" sobre el escenario, ya que tiene, al menos, un rodaje previsto, el de la tercera temporada de Águila roja, y sigue atesorando intervenciones en películas, también en formato corto, como El paraíso, primer trabajo como director del también actor Rubén Ochandiano.

Manuela, que tantas veces ha acudido al Español como espectadora, tiene ahora la posibilidad de decirle cada día al personaje al que da vida Fran Perea, Chris Keller, "qué hermoso es estar aquí", y es entonces cuando se permite el gusto de echar una mirada al patio de butacas, otro sueño cumplido para una actriz embarcada en uno de sus proyectos más apasionantes.

Dirige esta adaptación del clásico de Miller Todos eran mis hijos Claudio Tolcachir, un argentino, casi español de adopción por el público y la profesión, por todos los que disfrutaron con La omisión de la familia Coleman y Tercer cuerpo. Tolcachir ha sido el encargado de reunir a actores con distinta formación y experiencia: Carlos Hipólito, Gloria Muñoz, Fran Perea, Jorge Bosch, Alberto Castrillo-Ferrer, María Isasi, Nicolás Vega y Ainhoa Santamaría. Para todos ellos tiene Manuela buenas palabras y agradecimientos, para ellos y los espectadores que disfrutan con el buen teatro.