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La Fiscalía italiana investiga al presidente del banco vaticano por violar la ley de blanqueo

  • Han embargado 23 millones de euros del Instituto de Obras Religiosas
  • Matiza que no hay sospecha de lavado de dinero negro en sí
  • El Vaticano, "perplejo"

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Veintitrés millones de euros   de la Banca Vaticana han   sido requisados por la Justicia. Se trata de una medida cautelar por   un posible delito de omisión que se prevé en la Ley Antiblanqueo de dinero.

La juez Maria Teresa Covata   está investigando al presidente de la   Banca   Vaticana (conocido como IOR, Instituto para las Obras Religiosas), Ettore Gotti, y otro alto dirigente de la misma institución.

El dinero incautado proviene   de dos transferencias bancarias: una   de 20 millones de   la JP Morgan y otra de 3 millones del Banco Fucino.

En una nota oficial,se aclara que la retención del capital no se debe a que haya prueba alguna de que ese dinero provenga   de blanqueo de capiteles, sino que se trata de una acción cautelar por posible vulneración del artículo 55 del decreto 231 del año 2007 en el que se indica que   estos delitos   están penados con penas de   hasta 3 años de cárcel y 50.000 euros de multa.

Ésta es la primera investigación de la Justicia   que alcanza a la cúpula de la Banca vaticana desde que pasara a   ser competencia de los tribunales italianos, según un fallo de 2003 del Tribunal Supremo.

La Fiscalía empezó a actuar tras la presentación de informes  de una transacción sospechosa por parte de la Unidad de  Inteligencia Financiera del Banco de Italia,  con la suspensión  de la misma operación durante cinco días laborables.

El Vaticano, perplejo

Frente a esta situación, la Santa Sede ha expresado su "perplejidad y asombro". Mediante un comunicado de su Secretaría de Estado, el Vaticano ha reiterado la "clara voluntad" que existe por parte de su banco de ofrecer "plena transparencia" en lo que respecta a sus operaciones financieras, y ha confirmado su "máxima confianza" en el presidente de la entidad.

"Las autoridades del IOR desde hace tiempo están trabajando en los contactos y reuniones necesarios, ya sea con el Banco de Italia o con los organismos internacionales competentes, para la inserción de la Santa Sede en la llamada 'Lista Blanca'", ha asegurado el Vaticano.

"La Santa Sede manifiesta por ello perplejidad y asombro por la iniciativa de la Fiscalía de Roma, teniendo en cuenta que los datos informativos necesarios están ya disponibles en la oficina competente del Banco de Italia, y operaciones análogas tienen lugar actualmente con otras entidades de crédito italianas", ha añadido.

Por otro lado, el Vaticano ha precisado que "En lo que respecta a los importes citados, se manifiesta que se trata de operaciones de transferencia por tesorería en entidades de crédito no italianas cuyo destinatario es el mismo IOR".

La Santa Sede también ha insistido simismo en su "clara voluntad" de colaborar en la plena transparencia de las operaciones financieras del IOR mediante "procedimientos destinados a prevenir el terrorismo y blanqueo de capitales".

Sospechas sobre el IOR

En junio, el diario La Repubblica había alegado que el banco era sospechoso de estar involucrado en operaciones de blanqueo de dinero y que una investigación había sido abierta por la fiscalía de Roma.

El IOR, que administra las cuentas de las órdenes religiosas y asociaciones católicas, es una estructura que disfruta de extraterritorialidad concedida al estado papal, y por lo tanto no queda vinculada por las normas aplicables a las instituciones financieras en Italia.

Según La Repubblica, el tribunal averiguó que el banco tenía cuentas en instituciones italianas con un propietario identificado sólo con el acrónimo IOR.

En una de estas cuentas, descubierta en 2004, "aproximadamente 180 millones de euros han circulado en dos años", ha asegurado el diario.

"La hipótesis de los investigadores es que los sujetos con domicilio fiscal en Italia utilizar el IOR como una pantalla para ocultar diversos delitos como el fraude o la evasión de impuestos", señalaba el periódico.

Hace aproximadamente un año, el IOR nombró a Gotti Tedeschi, hasta entonces representante en Italia del grupo español Santander, como presidente en sustitución de Angelo Caloia.

Gotti Tedeschi, un experto en ética en las finanzas, habría sido elegido según los medios de comunicación para restablecer el orden en las cuentas de la IOR.

El banco vaticano ya estuvo implicado en 1982 en el escándalo asociado a la  bancarrota fraudulenta del Banco Ambrosiano, por aquel entonces el  principal banco privado italiano.