Kim Jong-il nombra general a su hijo y potencial sucesor

• El anuncio coincide con la convención del Partido de los Trabajadores
• Será el mayor evento desde 1980 del Partido Comunista

En Corea del Norte se prepara el relevo del dictador Kim jong II

El dirigente de Corea del Norte, Kim Jong Il, ha nombrado generales a su hijo y potencial sucesor, Kim Jong Un, y a su hermana, Kyong Hui, según ha informado la agencia oficial de Corea del Norte, KCNA.

Los nombramientos coinciden con la celebración de la convención del Partido de los Trabajadores, la primera en 30 años, en la que se especula con que Kim podría designar como su sucesor a su hijo menor. De momento, esta cumbre ya ha significado la primera mención en la prensa oficial de Kim Jong Un.

Pyongyang acogerá a partir de este martes una histórica conferencia del Partido de los Trabajadores de Corea del Norte para elegir a su cúpula dirigente.

Según ha informado la agencia norcoreana KCNA, delegados del partido procedentes de todo el país han comenzado a llegar a Pyongyang para participar en el mayor evento político en el país desde 1980, cuando Kim Jong-il fue nombrado sucesor de su padre, Kim Il-Sung, fundador del único régimen estalinista hereditario del mundo.

La conferencia extraordinaria del partido único norcoreano para renovar a su ahora avejentada cúpula de líderes no se convocaba desde 1966, cuando esa reunión duró una semana y contó con la participación de más de 1.300 delegados.

Se espera que la multitudinaria reunión que comienza este martes, sin que se sepa cuándo finalizará, sirva para dar un papel protagonista en el partido único norcoreano a Kim Jong-un, del que apenas se saben datos y que al parecer ronda los 27 años.

El misterioso Kim Jong-un

Su padre, Kim Jong-il, de 68 años, secretario general del partido y presidente de la Comisión Nacional de Defensa, parece haber acelerado el proceso para asegurar una sucesión estable después de de sufrir, según fuentes del espionaje surcoreano y estadounidense, una apoplejía en agosto de 2008.

La semana pasada, Pyongyang anunció que esta reunión, prevista originalmente para principios de septiembre, se celebrará el día 28, sin que se hayan explicado los motivos del retraso, que generó especulaciones en medios surcoreanos sobre el estado de salud de Kim.

Como es costumbre en este anacrónico régimen comunista, se espera que la reunión venga acompañada de la pompa que caracteriza a las celebraciones norcoreanas e incluso que se realice un desfile militar sin precedentes ante la presencia del líder norcoreano.

Este desfile, que fuentes del Gobierno de Seúl creen que será el mayor de la historia del país y contará con la participación de 10.000 soldados, también podría celebrarse con motivo del 65 aniversario del Partido de los Trabajadores el 10 de octubre.

Los medios surcoreanos prevén que el misterioso Kim Jong-un, de quien no se tiene una foto reciente, podría adoptar un nuevo papel dentro del régimen, incluso en el caso de que no se informe públicamente de su cargo.

Momento delicado para Corea del Norte

El diario surcoreano Chosun Ilbo afirma este lunes que el hijo menor de Kim Jong-il ya ha sido elegido delegado del partido para asistir a este congreso extraordinario junto a su padre.

Un experto citado por ese periódico considera muy probable que el hijo asista al encuentro del partido en calidad del delegado militar y que sea elegido miembro del poderoso Comité Central del partido.

También se especula que en esta reunión se otorgue un importante cargo del Comité Central del partido al cuñado del líder norcoreano, Chang Sung-taek, uno de los hombres más poderosos del país, para garantizar la sucesión.

No obstante, algunos expertos no descartan que Corea del Norte posponga el nombramiento oficial del sucesor hasta 2012, cuando el país comunista conmemorará el centenario del nacimiento de Kim Il-sung.

Esta reunión extraordinaria se celebra en un momento delicado para Corea del Norte, ya que está sometida a sanciones y al aislamiento internacional por su programa nuclear, que agrava la ya empobrecida economía del país comunista.