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Miles de personas se manifiestan en Madrid en una marcha fría y sin consignas

  • Toxo dice que "este clamor no puede dejar impasible al Gobierno"
  • Méndez ofrece la huelga al Ejecutivo para que cambie la reforma laboral
  • Las consignas apenas son coreadas por los manifestantes
  • 500.000 personas se han echado a la calle según los sindicatos
  • Las centrales sindicales dan por "ganada" la huelga general del 29-S
  • Los manifestantes portaron pancartas contra Rodríguez Zapatero

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Miles de personas se manifiestan en Madrid

Miles de personas se han concentrado en la manifestación convocada en Madrid por las centrales sindicales contra la reforma laboral (500.000 según los sindicatos, unos 40.000 según la Policía y 17.228 personas según el cómputo efectuado por la empresa Lynce para la Agencia Efe).

La marcha ha avanzado lentamente por las calles madrileñas y la sensación era de poca efusividad entre los manifestantes ya que, aunque se escuchaban pitos, las proclamas apenas eran coreadas.

La manifestación ha comenzado con media hora de retraso y se y no en Neptuno como estaba previsto debido a la afluencia de gente (5.000 personas según fuentes policiales a las 18:30 en Neptuno).

En la cabecera de la manifestación, junto a los secretarios generales de UGT y CC.OO., Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, se encontraban el secretario general de Izquierda Unida, Cayo Lara y el diputado de esa misma formación en el Congreso, Gaspar Llamazares.

Todos ellos llegaron sobre las 20:20 horas a la Puerta del Sol, donde les aclamaron los manifestantes congregados. Allí, Javier López, secretario general de CC.OO. de la Comunidad de Madrid ha asegurado a los trabajadores que "habéis ganado la huelga general".

Por su parte, José Ricardo Martínez, secretario general de UGT, ha denunciado "las amenazas empresariales: nos veremos en los tribunales".

"Este clamor no puede dejar impasible al Gobierno"

"Vamos a ganar el futuro. La huelga va a tener su correspondencia en la modificación de las políticas". Así de rotundo y confiado se ha mostrado el secretario general de CC.OO, Ignacio Fernández Toxo, al término de la manifestación en Madrid.

Más vitoreado que su compañero de UGT, Toxo ha señalado que "ahora la pelota está en el tejado del Gobierno" por lo que le ha pedido "que convierta la huelga en una oportunidad para el cambio, desde la rectificación".

"La única alternativa que tiene el Gobierno es mirar a la izquierda", ha subrayado Toxo, quien ha concluido con "una ley se puede cambiar por otra ley", en alusión a la reforma laboral.

En la misma idea, ha insistido el líder de UGT, Cándido Méndez, quien ha comentado que "el Gobierno está entre la espada y la pared" y que debe "reconciliarse con la inmensa mayoría del pueblo español". Para ello, ha brindado al Ejecutivo central la huelga general como "un clavo ardiendo al que agarrarse"

Méndez ha agradecido a las organizaciones que han apoyado la huelga, con una especial mención a IU.

Antes de que finalizara la manifestación, con el Himno de la Internacional y los puños en alto, Toxo ha augurado que algún día "la crónicas dirán que España fue un clamor contra la resignación". Por ello ha pedido al Ejecutivo que no se quede impasible y reaccione, ante unas manifestaciones que han calificado de "éxito indudable".

Según los datos facilitados por los sindicatos, más de un millón y medio de personas se han manifestado en las concentraciones de todo el país, de las cuales 500.000 han estado en Madrid.

Una marcha silenciosa

Según informaba nuestra compañera María Maicas, desde la manifestación, la sensación era que ésta manifestación no está a la altura de una huelga general.

La marcha estaba integrada por grupos muy aislados, que incluso avanzaban delante de la cabecera. Asimismo, aunque se lanzaban muchas consignas, no había ninguna que destacase sobre las demás.

"Más bien hay gente que lanza un cántico, pero luego no son seguidos por los demás. Al margen de los pitos, es una manifestación bastante silenciosa", informaba Maicas.

Además, nuestra compañera señalaba que en la misma manifestación se han producido críticas contra los propios sindicatos.

"Ha habido una performance de gente que parodiaba a los sindicatos. Uno de ellos interpretaba el papel de un hipotecado, que son los grandes olvidados de esta jornada", comentaba María Maicas.

En la Puerta del Sol, un gran cartel acusaba a las organizaciones de ser "traidores, la huelga es de los trabajadores".

Allí, mientras informábamos del ambiente silencioso que reinaba, un sindicalista de CC.OO. nos ha reprendido diciendo que "estáis mintiendo. No gritamos porque ya llevamos mucho tiempo haciéndolo y estamos cansados ya".

"Zapatero dimisión"

No obstante, "Zapatero dimisión" ha sido uno de los gritos que más se ha escuchado en la marcha.

"El presidente del Gobierno me ha decepcionado. No esperaba que hiciera esta reforma laboral", contaba a RTVE.es María José, una profesora universitaria.

Antonio Romero, trabajador del sector de la madera, también estaba desilusionado. "El presidente dijo que no se iba a olvidar de los trabajadores. Con las últimas reformas ha demostrado todo lo contrario".

Entre banderas de UGT, CC.OO. e IU, los manifestantes portaban pancartas con diferentes lemas como "ZPP, No", "ZP Traidor" y "No a los recortes laborales".

No a la reforma laboral

En la concentración también se han escuchado gritos contra la reforma laboral aprobada por el Gobierno y el Congreso. Pero se han coreado pocas consignas y se han usado muchos silbatos.

Rubén, un joven que este 29-S ha hecho huelga, aseguraba que "prefiero perder el dienro de hoy a que nuestros hijos, nietos y nosotros mismos tengamos menos derechos".

"Es que es totalmente injusta", nos decía José, trabajador del metal de 50 años. "Y lo peor de todo es que la gente no se está dando cuenta de como estamos perdiendo derechos los trabajadores", afirmaba lacónica María José.

Contra la congelación de las pensiones

Asimismo, a la manifestación han acudido personas venidas de todos los lugares de España, como María Pilar Martín, jubilada que reside en Ávila.

Protestaba por la congelación de las pensiones. "Si no me suben la pensión es como si me estuvieran quitando poder adquisitivo, es como si me bajaran la pensión". "Por este camino no vamos a ninguna parte: los pobres seremos más pobres y los ricos más ricos", aseguraba María Pilar.

Reparto de la crisis

Para muchos de los manifestantes, y así lo han mostrado en las pancartas, lo peor "es el reparto que se está haciendo de la crisis. Me están quitando dinero para solucionar lo que otros han provocado", contaba Mario indignado, profesor de enseñanza secundaria.

Por eso, unas 450 personas, según fuentes policiales, se congregaron antes de la manifestación frente a la Bolsa de Madrid. "Estamos aquí para decir que los culpables de la crisis no somos los trabajadores: es el capital. Los empresarios quieren imponer en toda Europa sus designios a costa de desmantelar el Estado del Bienestar, reducir las pensiones, explotar al trabajador y destruir el planeta. Y encima dicen que son nuestros salvadores", decía Manuela Gómez, profesora.

Contra el PP

Pero los manifestantes, y también los sindicatos, han mostrado su rechazo al Partido Popular. En especial, a Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, muy abucheada en el final de la manifestación en Sol. "Que no se confundan. No estamos tampoco a favor del PP", subrayaba Silvia.

"No queiremos ver a los 'azulitos' en el Gobierno", decía María José. "Queremos que Zapatero sea valiente y mire a la izquierda, no a los nacionalistas o a la derecha. Que vire a la izquierda, que puede cambiar. Si no, caerá el Gobierno", subrayaba esta profesora universitaria a RTVE.es al principio de la marcha.

La misma idea que, al finalizar, ha transmitido el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, que ha animado al Gobierno "a pactar con los grupos de izquierda los Presupuestos Generales del Estado".