Condenado a 18 años de cárcel un maltratador que mató a su esposa y se tiró al vacío
- El condenado asestó 11 puñaladas a su mujer y trató de suicidarse
- Se le han aplicado atenuantes por estar bajo los efectos de las drogas
- Los hechos ocurrieron en Sevilla en febrero de 2009
- Guía sobre violencia de género. Teléfono de atención: 016
La Audiencia de Sevilla ha condenado a 18 años y cuatro meses de cárcel a un hombre por violencia machista habitual y por el asesinato de su esposa a puñaladas, tras lo cual se arrojó al vacío desde un cuarto piso y pasó varios meses hospitalizado.
La Audiencia ha impuesto al acusado, P.C.M., 17 años y medio de cárcel por un asesinato alevoso y otros diez meses por un delito de maltrato habitual, aplicándole las atenuantes de confesión de los hechos y drogadicción.
El homicidio de C.M.R., entonces de 30 años, ocurrió en la noche del 9 de febrero de 2009 en el domicilio familiar de la barriada sevillana de Los Pajaritos, cuando el acusado la sorprendió en la cama cuando estaba adormilada y la apuñaló once veces, provocando su muerte por hemorragia masiva.
Avisó al 112 un día después
El acusado, de 29 años, dijo a los jueces el pasado 8 de septiembre que, al descubrir que había matado a su esposa, intentó suicidarse tres veces, sin éxito.
Primero se metió en la bañera con un secador de pelo encendido, luego hizo una ingesta masiva de pastillas y, al despertarse hacia las 15.40 horas del día siguiente, se tiró por la ventana desde un cuarto piso en su vivienda de la barriada de Los Pajaritos.
Previamente, P.C.M. llamó al servicio de emergencias del 112 diciendo que había matado a su esposa y que se iba a tirar por la ventana, y cuando la Policía acudió al lugar y se lo encontró tendido en la calle con las dos piernas rotas les dijo: "Me he cargado a mi mujer y ahí queda eso".
El hombre dijo a los jueces no recordar el momento del homicidio pero atribuyó su comportamiento a los celos que tenía por las presuntas relaciones de su esposa con un policía local y a la dependencia del alcohol y las drogas que sufría.
La sentencia de la Audiencia no aprecia la agravante de ensañamiento, como había pedido la acusación particular que ejercieron los padres y dos hijos de la fallecida, e impone a P.C.M. el pago de 12.500 euros de indemnización a cada progenitor y 140.000 a sus hijos.
Junto al delito de asesinato, la acusación pidió para el procesado dos años de cárcel por un delito de maltrato habitual ya que la pareja, casada desde 2000, vivió un deterioro de sus relaciones a partir de 2004 debido a la adicción del acusado al alcohol y a la cocaína y empezó a hacer objeto a la víctima de numerosos episodios de violencia física y verbal