Los consejos de un viajero experto

• El director Nómadas  (RNE) nos cuenta trucos para ahorrar en nuestros viajes
• La regla de oro es comparar y buscar con mucha antelación
• Colabora con nosotros: ¿Cómo ahorras tú cuando viajas?

Los viajes son un producto de precio extremadamente variable. El buscador de chollos tiene que disfrazarse de broker y moverse en Internet como si fuera la Bolsa de Valores. No seré yo quien descubra las muchas virtudes de este medio.

Pero ojo, puede ser un error descartar de entrada las fórmulas tradicionales. La agencia de viajes del barrio, sin ir más lejos, puede proponernos una oferta sobre el papel que no tenga nada que envidiar a la que hemos encontrado en la pantalla de nuestro ordenador. La regla de oro es comparar.

Lo primero, los billetes. En el caso de los trenes y los aviones (especialmente el de estos últimos) la antelación juega siempre a nuestro favor.

Las mejores tarifas aéreas suelen encontrarse dos meses antes del despegue y, curiosamente, los precios tienden a ser más bajos si se consultan por la tarde. Existen varios portales especializados que permiten realizar búsquedas simultáneas en decenas de compañías para localizar el coste más bajo para un trayecto y una fecha señaladas.

Viaja fuera de temporada

En general los adjetivos de temporada 'alta' y temporada 'baja' dan pistas de su rango de precios puede ser una buena idea -si podemos- viajar cuando casi nadie lo hace. Y si encima tenemos una cierta flexibilidad, si nos da igual salir un martes en vez de un viernes, las probabilidades de sacar billete barato aumentan.

Apliquemos nuestra regla de oro y busquemos en varias páginas; las diferencias de precio para idénticos vuelos pueden sorprendernos.

Una vez seleccionada nuestra opción y antes de pagar, conviene echar un vistazo a la web corporativa de la aerolínea en cuestión: quizás encontremos ofertas exclusivas para reservas a través de su portal.

Hay que hacer cuentas

Y mucho cuidado con las low cost, no nos dejemos deslumbrar por aparentes gangas que, muchas veces, acaban costando lo mismo que en las compañías convencionales, sólo que con menos comodidades.

Hagamos cuentas, sumemos al precio del viaje el de las maletas facturadas, el cargo por tarjeta, el largo viaje a la ciudad cuando el aeropuerto es secundario y los imprevistos que pueden costarnos caros en el mostrador de facturación (la creatividad recaudatoria alcanza niveles irritantes).

Algunos transportistas imponen al equipaje un límite de peso inferior al habitual y exigen unas dimensiones muy concretas para los bultos que se transportan en cabina. Cualquier exceso lo cobran caro, suma y sigue ...

Muchas opciones para dormir

La técnica para conseguir buenos precios en hoteles, hostales, apartamentos, albergues o campings tiene principios en parte similares.

El factor tiempo quizás no sea tan definitivo como en el transporte, pero sí conviene cotejar varias centrales de reserva y acceder a la web del propio establecimiento (son bastante frecuentes las promociones).

También es recomendable hacerse con una guía de viaje del destino: hay opciones de alojamiento económicas que no aparecen en los buscadores de Internet. Y si nos ha pillado el toro, que no cunda el pánico: de perdidos al río. Muchas páginas y agencias tienen ofertas 'de último minuto' para rezagados que pueden darnos una alegría económica.

En este caso no podremos ser demasiado exigentes en cuanto al destino, pues sólo se liquida lo que no se vende.

¿Maratón a la japonesa?

Una vez instalados toca iniciar la visita y aquí también podemos ahorrarnos un pico. Busquemos una oficina de información turística y consultemos los productos disponibles.

En las grandes ciudades una city card puede ser una buena compra; suelen ofrecerse con distintos períodos de validez (entre un día y una semana) y habitualmente incluyen la entrada a algunos museos y atracciones, descuentos y un abono de duración limitada para los transportes urbanos.

Estas tarjetas están bien, pero hagamos números antes de comprarlas. ¿Realmente queremos ver todos los museos que incluye?, ¿es necesario moverse en metro, autobús o tranvía?

Documentos útiles

Muchas veces el ahorro se consigue prescindiendo de estos inventos que convierten nuestra visita en un maratón a la japonesa.

Un buen consejo es llevar encima cualquier documento que pueda servir para obtener descuentos: el DNI o el pasaporte (eso siempre), pero también carnés de estudiante, de profesor, de jubilado, etc.

Busquemos un buen precio, pero sin obsesionarnos. La diferencia en el peor de los casos puede ser de unas decenas de euros. Nuestro tiempo vale mucho más.

• El programa Nómadas, dirigido y presentado por Álvaro Soto, es una aventura sonora que invita a explorar los rincones más especiales de nuestro planeta azul. Se emite en RNE los sábados a las 07:00 y lunes a las 05:00 horas.