Banesto ganó un 18,6% menos hasta septiembre por el esfuerzo en provisiones
- El beneficio en nueve meses se coloca en 450,61 millones de euros
- La tasa de morosidad ha crecido hasta el 3,80%
Banesto obtuvo un beneficio neto atribuido de 450,61 millones de euros entre enero y septiembre de este ejercicio, cifra que representó un descenso interanual del 18,6%, debido a la menor actividad y a que optó una vez más por destinar parte de sus ganancias a engordar su bolsa de provisiones.
La entidad que preside Ana Patricia Botín, la única española en la lista Forbes de mujeres poderosas, reforzó sus provisiones genéricas con otros 337 millones, que le permitirán afrontar con más comodidad una tasa de morosidad que se situó en el 3,80% frente al 2,59% que tenía un año antes.
El ratio de cobertura de la cartera crediticia se situaba, por su parte, en el 59,16%, inferior al 67,23% de septiembre de 2009, al tiempo que las dotaciones para insolvencias crecían el 11,5% y alcanzaban los 291 millones de euros, según ha informado el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Más capitalización
En este contexto de "menor demanda crediticia", Banesto "ha continuado con su política de crecimiento selectivo", por lo que, al cierre de septiembre, su inversión crediticia se situaba en 74.599 millones de euros, un 0,9% más que al cierre del tercer trimestre de 2009, dice la entidad.
En cuanto al ahorro, al finalizar septiembre, la entidad atesoraba en total 69.571 millones de euros en recursos de clientes, el 5,3% más que un año antes, de los que 56.507 millones correspondían al sector privado y habían crecido el 8,9% interanual, impulsados especialmente por los depósitos a plazo, que habían aumentado el 39,3%.
El nivel de capitalización del banco sigue superando los mínimos exigidos, con un exceso de "más de 2.300 millones", explica Banesto, que terminó el noveno mes del año con un ratio Tier 1, que mide los activos de máxima calidad, del 9%.
Suficiente liquidez
Asimismo, la entidad mantuvo unos niveles de liquidez "holgados" tras reforzarlos durante el tercer trimestre con emisiones de cédulas hipotecarias y notas por importe superior a 1.100 millones.
En cuanto a los principales márgenes de la cuenta de resultados, el de intereses se situó en 1.285,5 millones de euros, el 1,5% menos que un año antes, a pesar de la ralentización en la evolución del negocio, gracias a la gestión de márgenes y balance desarrollada por el banco.
La entidad ingresó durante este periodo 462,6 millones de euros en comisiones netas, un 2,2% más que en septiembre de 2009, al tiempo que sumó unos ingresos de 115,8 millones por operaciones financieras, que fueron un 4,4% inferiores a los de septiembre de 2009.
De esta forma, el margen bruto correspondiente a los nueve primeros meses de 2010 cayó el 1%, hasta los 1.911,6 millones de euros, mientras que el resultado neto de explotación se reducía el 1,1% y quedaba en 1.167,4 millones después de restar unos gastos de explotación de 744,15 millones, que se habían reducido el 0,8%, fruto de la disciplina aplicada por el banco.
Mejora de la eficiencia
Esta evolución de ingresos y gastos dio como resultado una nueva mejora en el ratio de eficiencia, que se colocó en el 39,0% frente al 39,3%, registrado hace doce meses.
En los nueve primeros meses de 2010 la entidad continuó reforzando su situación patrimonial, con dotaciones a las provisiones de activos mobiliarios e inmobiliarios y a la provisión genérica de insolvencias por un total de 418 millones de euros.
A este fin se destinaron las plusvalías extraordinarias de 114 millones de euros procedentes de la venta de oficinas del banco, que posteriormente han sido alquiladas, y de la venta de cartera, junto con dotaciones por importe de otros 304 millones de euros, explica la entidad.