Evacuan la zona del vertido en Hungría ante el riesgo de rotura de la balsa
- 800 personas han sido evacuadas en la aldea Kolontár
- La pared del sector que ya se rompió el lunes está debilitándose
- El Gobierno húngaro reconoce que la situación es "muy grave"
Las autoridades húngaras han decidido evacuar la aldea de Kolontár, afectada el lunes por un grave vertido tóxico, ante el riesgo de que se fracture la balsa de la que ya se escaparon un millón de metros cúbicos de lodo que han inundado 40 kilómetros cuadrados y matado a siete personas.
La agencia MTI ha indicado que la Policía comenzó a evacuar a la población durante la noche, tras comprobarse que la pared del sector que ya se rompió el lunes estaba debilitándose.
La portavoz de Protección Civil en la zona, Gyorgyi Tottos, ha explicado que unas 800 personas han sido evacuadas e instaladas en un pabellón de deportes y dos colegios de la cercana ciudad de Ajka.
"Creció el riesgo de rotura, aunque se trata de una evacuación preventiva", ha explicado la portavoz, quien ha insistido en descartar el peligro real de que la balsa se rompa.
Gobierno húngaro: la situación en la balsa es "muy grave"
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha reconocido que la situación "es muy grave". "No quiero crear grandes esperanzas" ha explicado Orbán en una improvisada rueda de prensa en la localidad de Ajka.
El primer ministro indicó que "en el peor caso", si la balsa finalmente sufre una nueva fractura, se podrían verter unos 500.000 litros del lodo cargado de arsénico, silicio y metales pesados.
El jefe del Gobierno habló de "situación dramática" e indicó que la evacuación de Kolontár se ha ordenado porque "podrían estar en peligro vidas humanas".
La amenaza crece
El vertido ya ha inundado unos 40 kilómetros cuadrados en el suroeste de Hungría y ha causado la muerte a siete personas y heridas a unas 150.
Respecto al riesgo de que la contaminación llegue al Danubio en caso de una segunda oleada tóxica, Orbán aseguró que se dispone de las herramientas necesarias para que no afecte al segundo río más largo de Europa. "Estamos preparados para todo", dijo.
La Policía ha pedido a la población de Devecser que se prepare también para una posible evacuación.Los accesos a los dos pueblos más afectados, Kolontár y Devecser, que ya ayer estaban restringidos, han sido totalmente cerrados por la Policía.
En cuanto a los responsables de la catástrofe, Orbán señaló que ya se ha abierto una investigación y prometió que "las consecuencias serán muy graves".
"La compañía pagará, no hay duda", dijo en referencia a la metalúrgica MAL, dueña de la balsa donde se produjo el vertido.