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Trichet llama a la prudencia y evita cantar victoria sobre la crisis

  • Llama contra "el proteccionismo" y las barreras comerciales
  • El presidente del BCE pide consenso en la reforma financiera

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European Central Bank President Jean Claude Trichet gestures before his conference in Madrid
El presidente del BCE, Jean Claude Trichet.

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, ha advertido de que Europa debe mantener "cautela y prudencia", mientras se avanza en una reforma financiera para la que pidió colaboración y consenso a ambos lados del Atlántico, frente a la tentación del proteccionismo.

"Lo que necesitamos hoy no son guerras de ningún tipo, sino un compromiso sólido y renovado hacia una colaboración confiada y resoluta", ha indicado Trichet en Nueva York, tras hacer un llamamiento para decir "no al proteccionismo" y a la práctica de elevar las barreras comerciales impuestas a países vecinos.

No podemos cantar victoria

Durante una conferencia en The Economic Club de Nueva York el presidente del BCE añade sobre la situación de la economía europea: "No podemos cantar victoria. Tenemos que permanecer cautos y prudentes".

Afirma que aún queda mucho trabajo por hacer para conseguir "una reforma financiera que evite nuevas crisis" y que debe consensuarse "a nivel mundial".

Crecimiento moderado

Trichet, quien detalla que la entidad que preside ha confirmado "una moderación en el crecimiento de la zona euro para la segunda mitad de este año", señala, sin embargo, que sigue abierto el camino "modesto pero positivo" para la recuperación y destaca que la inflación europea seguirá "moderada" en 2011.

"De manera muy importante, apuntamos que las expectativas de inflación a medio y largo plazo continúan firmemente ancladas en línea con nuestra definición de estabilidad de los precios", indica el presidente del BCE, quien destacó que "en los últimos tres años" la zona euro ha sido capaz de "encontrar soluciones".

Detalla así la actuación de las autoridades económicas en el rescate del sector financiero en 2008 y las medidas de apoyo a Grecia, pero subraya que "aún queda mucho trabajo por hacer" en la revisión de las políticas económicas de la Unión Europea.

Mejor gobernaza en la eurozona

"Lo que necesitamos es un fortalecimiento fundamental en la gobernanza económica en la zona euro. Un área fundamental es la vigilancia de las políticas fiscales para prevenir un déficit excesivo y deudas públicas insostenibles", dice Trichet, tras recordar que la crisis demostró "la importancia de una mayor vigilancia de las políticas macroeconómicas".

Trichet habla así de las nuevas instituciones europeas dedicadas a tomar precauciones para "llevar al sector financiero de la sombra a un sistema regulado, reducir los riesgos haciendo las transacciones transparentes y asegurar las infraestructuras financieras, así como incrementar la protección de los consumidores".

El presidente del BCE ha explicado a los financieros de Wall Street que acudieron a escucharlo "la nueva arquitectura supervisora" de la Unión Europea, como el Consejo Europeo de Riesgos Sistémicos (ESRB, en sus siglas en inglés), a la que le queda "meses de intenso trabajo común para ejecutar nuevos poderes de regulación".

Estabilidad financiera

Además, se ha mostrado convencido de que se debe estar en "permanente alerta" para asegurar "la estabilidad financiera a largo plazo", algo que será posible con la creación de un "sistema financiero en el que una crisis de esta magnitud no pueda ocurrir de nuevo".

"Si podemos extraer una lección de las reuniones del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington es que la comunidad internacional es completamente consciente de la necesidad de permanecer vigilante ante la situación actual", explica Trichet, quien aboga por "el consenso y la colaboración entre los miembros de la comunidad internacional".

Trichet subraya así que es "esencial preservar, consolidar y reforzar la unidad demostrada por la comunidad internacional en este período de crisis", y se congratula de que en los últimos años haya habido "consenso" a ambos lados del Atlántico.