Los trenes regionales pasarán a depender de la Generalitat de Cataluña el próximo 1 de enero

• El acuerdo se ha cerrado entre el ministro de Fomento y el presidente catalán
• El traspaso deberá concretarse en la Comisión Mixta Estado-Generalitat

La red de trenes regionales que circulan por Cataluña será traspasará a la Generalitat el 1 de enero de 2011 después del acuerdo alcanzado este miércoles por el ministro de Fomento, José Blanco, y el presidente de la Generalitat, José Montilla, que tendrá que ser concretado en una Comisión Mixta.

Aunque Montilla ha señalado que, con el traspaso de los trenes  regionales "todo el tráfico ferroviario de pasajeros que discurre por  Cataluña será gestionado desde aquí", la transferencia sólo afecta a la  red convencional y no a la de alta velocidad, cubierta con los  ferrocarriles Avant que realizan también trayectos interiores por  Cataluña.

Según ha indicado en una rueda de prensa el ministro, el acuerdo se ha cerrado en una reunión con el presidente Montilla, celebrada durante aproximadamente una hora en el Palau de la Generalitat. La voluntad de ambas partes es que el traspaso se materialice el 1 de enero, de forma análoga al que tuvo lugar hace unos meses con la red de Cercanías, gestionada desde el pasado mes de enero por la Generalitat.

El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha expresado su satisfacción por el acuerdo y ha recordado que el traspaso de los trenes regionales está previsto en el Estatut. También se ha mostrado convencido de que la Comisión Mixta Estado-Generalitat concretará esa transferencia próximamente.

Blanco:"es una competencia de alto valor estratégico"

Blanco ha considerado ese traspaso como "una competencia de alto valor estratégico para Cataluña", porque "con cerca de 11 millones de viajeros por semana, supone el 38% de la cuota de mercado del área de media distancia de Renfe en toda España".

"La Generalitat -ha asegurado el ministro- pasará a ser el principal gestor de los servicios ferroviarios convencionales en Cataluña" y, con ello, el Gobierno estará "cumpliendo el texto del Estatut", que prevé la transferencia tanto de los servicios de cercanías como de los regionales.

Según Blanco, el acuerdo alcanzado "es fruto  del diálogo, del consenso y del entendimiento entre administraciones", algo que ha corroborado el presidente Montilla al indicar que "tiene un alto valor político y simbólico", al producirse un año después de que la Generalitat asumiera Cercanías.

El acuerdo alcanzado no cuantifica aún el valor económico del traspaso, y se remite a las negociaciones posteriores que tendrán lugar en la Comisión Mixta de Transferencias Estado-Generalitat y también en la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales Estado-Generalitat.

Sin conocerse aún las fechas concretas en que se reunirán ambas comisiones, el ministro José Blanco sí que ha anticipado que los convenios reguladores del traspaso de Regionales "se articularán como una ampliación de los alcanzados con Cercanías".

En cualquier caso, ha apuntado Blanco, lo importante es que el acuerdo "es de calado" y "supone un importante paso en la aplicación del Estatut", así como "una apuesta por una Cataluña fuerte en la vanguardia del desarrollo económico".

Ha explicado, asimismo, que en los Presupuestos del Estado de 2011 se prevé una inversión de más de 2.300 millones de euros en concepto de mejora de la red ferroviaria catalana, lo que convierte a Cataluña en la primera autonomía en volumen inversor en materia ferroviaria durante el próximo año. "Esto incluye -ha apuntado- la planificación del tan ansiado Corredor Mediterráneo, cuyo proyecto ya anuncio que muy pronto presentaré".

"Traspaso trampa" para CiU

Por su parte, desde CiU, el secretario general adjunto y número tres de esa formación a las elecciones catalanas, Felip Puig, ha denunciado lo que considera un "traspaso trampa", ya que -asegura- no prevé la transferencia efectiva de "las infraestructuras, las estaciones, las vías y el personal".

En la celebración de un coloquio en el Colegio La Salle en Barcelona, Puig ha criticado el "acuerdo electoral" alcanzado por Montilla y Blanco, que carece a su juicio de "solidez" porque "se plantea sobre unas bases que se tambalean".

Según Puig, "se mantiene la fantasía del traspaso de Cercanías", que tampoco incluyó las competencias sobre las infraestructuras ferroviarias.

"Sin el traspaso de Adif no habrá un traspaso efectivo de Renfe Cercanías y Regionales", ha advertido Puig, quien ha recordado el compromiso de CiU de "revisar" esas transferencias si gobierna.

La aceptación de este "traspaso en falso", según Puig, representa un "nuevo acto de sumisión" del presidente de la Generalitat, José Montilla, a los intereses del Ministerio de Fomento.