Valeriano Gómez cree que se creará empleo neto el año que viene

• Llamará a sindicatos y empresarios para retomar el diálogo social
• Gómez afirma que nunca estuvo en contra de la reforma laboral

El futuro ministro de Trabajo coge un taxi en Madrid.

El nuevo ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha asegurado que no está en contra de la reforma laboral, para cuyo desarrollo aboga por el diálogo con los agentes sociales, y auguró que en 2011 se creará empleo neto.

En declaraciones a la Cadena Ser, Gómez, afirma que las primeras llamadas telefónicas que hará como ministro serán a empresarios y sindicatos con la esperanza de poder retornar "pronto" al diálogo y a la senda de la concordia y del consenso social.

"Lo que hay que hacer ahora es ofrecer un marco de diálogo para desarrollar la reforma para que tenga plena efectividad. Nuestra historia nos dice que las reformas que tienen un buen grado de respaldo social funcionan mejor y ese es el objetivo del Gobierno: desarrollar con diálogo la reforma", ha señalado.

También ha matizado que "nunca" estuvo en contra de la reforma laboral y ha explicado en Onda Cero que, en general, es "una reforma correcta" que se inserta en la mejor tradición de la política laboral de los últimos 30 años: "hacer más flexible el contrato estable y hacer más justificado y digno el temporal", ha apuntado Gómez.

Desarrollo de la reforma laboral

El nuevo titular de Trabajo ha insistido en que hay muchos aspectos a desarrollar de la reforma laboral, que requerirán decretos y otras normas con rango de ley, y ha subrayado que el objetivo, por tanto, debe ser restaurar el diálogo social y "tratar de reformar las cosas en la medida en que sea posible para obtener un alto grado de consenso".

En cuanto a su participación en las manifestaciones en la huelga general del 29 de septiembre, explica que ha participado "plenamente" en la elaboración, diseño y discusión de la reforma laboral, y aseguró que no se siente "incómodo" defendiéndola.

No obstante, ante el clima "antisindical" que se generó en los días previos a la huelga se sintió en la obligación de participar porque se lo pedía "el corazón" y quería estar cerca de los trabajadores y los sindicatos ese día.

Respecto al próximo cambio en la presidencia de la CEOE  cuyas elecciones se celebrarán el 21 de diciembre, apunta que es  importante que las organizaciones tengan "estabilidad, en su dirección,  un buen nivel de representación interna" porque eso  siempre ayuda al diálogo y beneficia a toda la sociedad.