"Viva la vida, vivan los mineros, viva Chile"
- El Gobierno chileno rinde homenaje a los 33 mineros en el palacio presidencial
- El jefe de turno agradece los esfuerzos para salvarlos
- Piñera se compromete de nuevo a mejorar la seguridad laboral
"Viva la vida, vivan los mineros, viva Chile". Con estas palabras el presidente chileno, Sebastián Piñera, ha cerrado un emotivo homenaje a los 33 mineros atrapados durante 70 días a 700 metros de profundidad, que han recibido en el palacio presidencial de La Moneda una insignia del Bicentenario de Chile y una réplica de la cápsula 'Fénix 2', que les sacó a la superficie.
Piñera, que volvía de una gira europea que ha acabado con polémica, ha reiterado su compromiso de que en los próximos días se conocerán las medidas claves para un "nuevo trato" a los trabajadores, después de que los 33 mineros denunciasen las condiciones en las que trabajaban en la mina San José tras ser rescatados.
El mandatario chileno presidió una ceremonia solemne en la que estuvo acompañado de su esposa y de los ministros de Minas, Laurence Golborne, y de Sanidad, Jaime Mañalich, cuyo papel en las tareas de rescate ha destacado en su intervención.
Agradecimiento
Antes, los 33 mineros han recibido la réplica de la cápsula, una bandera de Chile y la insignia del Bicentenario tras pasar por la alfombra roja que les llevaba al palacio presidencial, donde centenares de personas les han aclamado como auténticas estrellas mediáticas.
También recibieron una condecoración los seis trabajadores de Protección Civil que participaron en el rescate.
Por su parte, el jefe de turno de los mineros, Luis Urzúa ha dado en nombre de sus compañeros "las gracias a Chile".
"El país ha estado como se merece, muy alto, eso es grande para nosotros. Todos los chilenos pueden estar orgullosos que nuestro Presidente y nuestra gente nos cuidó como corresponde", ha añadido Urzúa.
Piñera, de presidente a delantero
En cuanto a la mejoras en seguridad laboral reclamadas por los mineros tras el accidente y posterior rescate, Piñera ha prometido un nuevo trato laboral.
"Vamos a anunciar un nuevo trato en materia laboral (...) de nosotros depende decidir en qué país queremos vivir, desarrollar nuestras vidas y qué país queremos para nuestros hijos".
También ha agradecido a los familiares de los mineros, "que nos dieron un ejemplo" y ha bromeado señalando a las esposas de los trabajadores que "yo le decía a mi mujer (Cecilia Morel) que si ella me quisiera la mitad de lo que ustedes quieren a sus maridos yo me sentiría el hombre más feliz del mundo".
En ese momento, Cecilia Morel dijo a Piñera que si él estuviera a 700 metros de profundidad lo querría igual que a los mineros sus esposas.
La jornada ha culminado en el Estadio Nacional de Santiago, con un partido de fútbol entre los mineros y funcionarios del gobierno, con Sebastián Piñera de centro delantero de este último equipo.