EE.UU. crece ya un 2% anual gracias a la mejora del consumo
- La economía estadounidense mejoró tres décimas en el tercer trimestre
- El gasto de los hogares aumentó un 2,6% en ese período
- El ritmo de crecimiento se había ralentizado hasta el 1,7% entre abril y junio
El crecimiento de la economía de Estados Unidos se aceleró durante el tercer trimestre, con lo que ha alcanzado una tasa de crecimiento anual del 2%, tres décimas más que en el trimestre anterior, ha informado este viernes el Departamento de Comercio estadounidense.
Así, EE.UU. acumula ya cinco trimestres consecutivos con avances en su actividad económica.
Sin embargo, esta tasa de crecimiento sigue siendo inferior al potencial del país, lo que significa que la economía no funciona todavía con suficiente vigor para permitir la bajada del paro, muy cerca al nivel máximo en una generación.
El consumo de los hogares como motor
Esa mejora del crecimiento refleja, según el Departamento de Comercio estadounidense, "una desaceleración neta de las importaciones y una aceleración de la producción y del consumo de los hogares".
El gasto de los consumidores -que representa más de dos tercios del producto interior bruto (PIB) del país- creció a un ritmo del 2,6% entre julio y septiembre, el más fuerte desde finales de 2006.
En el lado negativo, se ha registrado un retroceso en el gasto en vivienda de las familias, así como una desaceleración en la inversión de las empresas y en las exportaciones.
Por su parte, el Departamento de Trabajo ha indicado que el coste de la mano de obra subió un 0,4% en el tercer trimestre, con lo que ha aumentado apenas un 1,9% entre septiembre de 2009 y el mismo mes de este año.
Sin suficiente vigor para reducir el paro
El elevado índice de desempleo -que se sitúa en un 9,6%, a pesar de que la economía retornó al crecimiento a mediados de 2009- sigue debilitando la capacidad de los trabajadores para negociar mejores remuneraciones.
Los datos sobre el PIB difundidos este viernes se encuadran dentro de lo esperado por la mayoría de los economistas, y sirven para apuntar una reactivación más firme que la que insinuaba la decepcionante cifra del segundo trimestre.
La recesión que comenzó en Estados Unidos en diciembre de 2007 ha sido la más larga y profunda desde la Gran Depresión de los años 1930, y ha causado la pérdida neta de más de 8 millones de puestos de trabajo.
En el último trimestre del año pasado, el crecimiento de la economía estadounidense creció a un ritmo del 5%. Después, entre enero y marzo, la tasa anual de crecimiento quedó situada en un 3,7% y, entre abril y junio, se ralentizó hasta el 1,7%. En ambos casos, aunque el resultado trimestral fue positivo, se produjo una caída al comparar con los datos de los trimestres equivalentes de 2009, que registraron crecimientos negativos.