Alemania suspende los vuelos de carga procedentes de Yemen
- Se ha revelado que uno de los dos paquetes bomba pasó por Alemania
- Berlín se une a la misma medida adoptada por Francia
El Gobierno alemán ha decidido suspender los vuelos de carga procedentes del Yemen, tras revelarse que uno de los dos paquetes bomba destinados a Estados Unidos pasó por Alemania, desde donde fue transferido en otro avión hacia Inglaterra.
"El Gobierno alemán ha decidido la suspensión inmediata de todos los vuelos de carga hacia Alemania", indicó el ministro del Interior, Thomas de Maizière, en declaraciones al dominical Bild am Sonntag.
La decisión del gobierno de Berlín sigue a la adoptada en el mismo sentido por Francia, que ya el sábado suspendió todos los vuelos de carga procedentes de ese país.
El mismo sábado, Maizière había asegurado que no había motivos concretos para reforzar las medidas de seguridad, situación que cambió tras revelarse que el paquete bomba detectado en el aeropuerto de East Midlands (norte de Inglaterra) había pasado por Colonia.
Según revela hoy Bild am Sonntag, las autoridades inglesas recibieron una alerta del Departamento de Investigaciones de lo Criminal de la policía alemana (BKA) informándoles del paquete sospechoso en un vuelo de carga.
El BKA había recibido a su vez informaciones al respecto de Arabia Saudí, pero no pudo detener a tiempo el transporte de UPS y el paquete siguió vuelo de Colonia hacia ese aeropuerto inglés.
Las autoridades yemeníes detuvieron ayer a una estudiante de medicina sospechosa de haber enviado hacía Estados Unidos dos paquetes con explosivos.
Al parecer, la joven fue identificada gracias a la tarjeta SIM de un teléfono móvil hallado en el paquete interceptado en el Reino Unido, que, al igual que el localizado en Dubái, tenía como destino dos sinagogas de Chicago.
Los paquetes fueron enviados desde Yemen por las empresas de mensajería estadounidenses UPS y FedEx, y se cree que Al Qaeda, que opera desde Yemen, está detrás de esta operación.
El primero fue localizado y desactivado en el aeropuerto británico de East Midlands, en un avión de UPS, y el segundo en un contenedor de FedEx en un avión qatarí que había hecho la ruta Saná-Doha-Dubái.