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La prima de riesgo que paga España por su deuda ha tocado su nivel máximo, previo a los test de estrés

  • El diferencial con los bonos alemanes ha llegado a superar los 200 puntos
  • Al cierre se han relajado un poco las tensiones y ha quedado en 194 puntos
  • También se encarece la rentabilidad de los bonos irlandeses, griegos y portugueses
  • El temor a una nueva crisis de deuda atenaza las bolsas de países periféricos
  • Puedes ver también el Especial de la crisis de deuda en Europa

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El Banco de España comunica un estacamiento de la economía española en el último trimestre

La prima de riesgo ofrecida a los inversores por comprar bonos españoles a diez años se ha situado al cierre de la sesión de este viernes 194 puntos básicos por encima de la que paga el bund alemán, el que sirve de referencia en Europa. De esta manera, se consigue relajar las tensiones sobre la deuda soberana española, que este viernes han llegado a tocar otra vez los 200 puntos básicos, el máximo alcanzado antes de la publicación de los resultados de los test de estrés de la banca europea en julio pasado.

Detrás de este repunte están los temores del mercado a que las dificultades de Irlanda desencadenen una nueva crisis en la deuda soberana de los países de la periferia del euro.

Al cierre de la sesión bursátil, los bonos españoles han logrado una leve rebaja de su prima de riesgo frente a los títulos alemanes, considerados los más seguros de la Unión Europea, y el rendimiento ofrecido con las obligaciones a 10 años ha acabado la jornada en el 4,355%, apenas dos centésimas más que el jueves.

El rendimiento de la deuda alemana se ha elevado tres centésimas, hasta el 2,418%, de modo que el diferencial entre la deuda soberana española y la germana bajó ligeramente hasta los 194 puntos básicos.

Irlanda, el origen de miedos renovados

Por su parte, el diferencial de los bonos a diez años de Irlanda ha llegado a escalar hasta los 542 puntos básicos, y en otros países de la periferia del euro, como Grecia la prima de riesgo se ha disparado hasta 903 puntos al tener que ofrecer una rentabilidad de 11,44% con sus títulos de deuda para atraer a los inversores.

El Gobierno de Irlanda acordó este jueves un recorte de 6.000 millones de euros para 2011, dentro de un plan de austeridad que espera reducir 15.000 millones de euros en los próximos cuatro años para poner en orden las finanzas públicas del país.

Así, Dublín trata de cumplir el objetivo de reducir su déficit público - actualmente en un 32% del PIB, el más alto de la UE- hasta situarlo en el 9,25% o el 9,5% del PIB el próximo año.

Las dos Europas en la Bolsa

Con este panorama, durante toda la sesión bursátil, se han observado comportamientos muy distintos entre los mercados de Centroeuropa y los de la periferia, que se consideran países más frágiles respecto a la confianza que despiertan en los inversores.

Pese a todo, al cierre, algunas bolsas periféricas han logrado enjugar gran parte de las pérdidas y Atenas, incluso, ha logrado terminar en positivo al subir su índice selectivo, el Athex 20, un 0,61%.

Ése no ha sido el caso del parqué español, donde se ha registrado la mayor caída del continente. El Ibex 35 ha retrocedido un 1,65%, lastrado sobre todo por la banca, y ha caído hasta el nivel de los 10.400 puntos (10.428,1 puntos).

Los bancos medianos han sido los más castigados: el Sabadell ha perdido un 3,57%, el Popular ha cedido un 3,49%, Bankinter ha caído un 2,56% y Banesto, un 2,10%. Entre los medianos se ha visto envuelto también el Santander, cuya cotización ha retrocedido un 2,61%.

Los valores que se han comportado mejor este viernes son los relacionados con materias primas, cuyos mercados se han convertido en destino de muchos capitales tras el anuncio de la Reserva Federal de que inyectará en la economía estadounidense más de 425.000 millones de euros. Así, Arcelormittal ha ganado un 2,65% y OHL un 0,84%.

Mientras, entre las grandes bolsas, la de Fráncfort ha concluído la sesión con un avance del 0,29% en su índice principal (Dax Xetra), mientras que en París, el Cac 40 ha terminado en tablas, y el FTSE 100 de Londres ha repuntado un 0,21%.

En Dublín, el selectivo (ISEQ 20) se desplomaba un 1,39%, y en Lisboa, el PSI-20 caía un 1,50%. Mientras, en Milán, el selectivo FTSE Mib cedía un 1,28%.

Por su parte, el euro ha parecido relajarse frente al divisa estadoundense y, al cierre de los mercados bursátiles europeos, se cambiaba a 1,4059 dólares, una cotización menor en un 1,2% respecto a la jornada del jueves, cuando alcanzó su máximo desde el pasado enero (1,42 dólares) debido al anuncio de la Reserva Federal.

El Banco Central Europeo (BCE) ha fijado este viernes el cambio oficial diario de la moneda única en los 1,4084 dólares.