Noche de calma tensa en El Aaiún tras declararse el toque de queda
- El reino alauita reconoce cinco agentes muertos y el Polisario, un saharaui
- Marruecos mantiene vetado el acceso a la prensa a la zona de El Aaiún
El Aaiún ha vivido una noche relativamente tranquila con un ambiente de calma tensa después de que el Gobierno de Marruecos declarara el toque de queda tras los enfrentamientos que se produjeron tras el desmantelamiento del campamento de protesta saharaui, según ha informado el corresponsal de TVE Antonio Parreño.
Aún no están claras las cifras de fallecidos tras los enfrentamientos entre jóvenes saharauis y las fuerzas policiales marroquíes, aunque el Reino de Marruecos reconoce al menos cinco muertos entre sus agentes -cuatro en los desalojos y uno en los disturbios- y el Frente Polisario habla de un saharaui muerto y de decenas de heridos y detenidos.
Esa víctima saharaui ha sido reconocida por las autoridades marroquíes, ya que el Procurador general del Rey de Marruecos (Fiscalía) en El Aaiún ha abierto una investigación sobre la muerte del saharaui Gargar Brahim Uld Mahmud Hamadi en los incidentes. Según un comunicado del Procurador difundido por la agencia oficial MAP, "se ha abierto una investigación bajo la supervisión del parqué general a fin de dilucidar las circunstancias en que murió Gargar Brahim Uld Mahmud Hamadi" y "se desarrolla dentro del respeto total de las garantías previstas por la ley".
Los enfrentamientos se produjeron tras el violento desalojo del campamento saharaui entre jóvenes saharauis que lanzaron piedras y cócteles molotovo y fuerzas policiales marroquíes, que emplearon bolas de goma, cañones de agua y gases lacrimógenos.
Según informa Parreño, es muy difícil conocer con exactitud qué es lo que está ocurriendo porque el Gobierno marroquí mantiene vetado el acceso a la zona de El Aaiún a los periodistas y ayer la compañía Air Marroc canceló los vuelos de once periodistas españoles a la zona. También están cerrados los accesos por carretera en Tantan y ningún extranjero puede cruzar ese límite, con lo que Marruecos parece asegurarse de que no haya testigos de lo que pasa en el Sáhara Occidental, informa el corresponsal de TVE.
El Istiqlal dice que no aceptará chantajes
Por su parte, el partido gubernamental marroquí, Istiqlal, ha advertido en un comunicado que no va a consentir el chantaje y la manipulación política de los movimientos sociales, según recoge un comunicado difundido por la agencia oficial MAP.
En referencia a los disturbios ocurridos en la capital de Sáhara Occidental, el órgano ejecutivo del partido "observa con orgullo la eficaz resistencia que los habitantes del campamento Agdeim Izik mostraron contra los intentos de los separatistas que han perpetrado actos de sabotaje para provocar malestar y ocasionar el caos".
Asimismo asegura que concede una "importancia extrema" a estos acontecimientos y subraya "las reivindicaciones sociales hechas por algunos de los habitantes y el intento de algunas personas por explotar este movimiento que tiene lugar en el contexto de la libertad, la pluralidad y el aperturismo" que según Istiqlal prevalece en Marruecos.
Por último, el partido encabezado por el primer ministro, Abás el Fasi, asegura que bajo la autoridad del monarca Mohamed VI, Sáhara Occidental ha experimentado importantes avances a nivel social, económico, cultural y político.