El transporte nuclear alemán termina su recorrido tras superar todos los obstáculos
- La Policía ha despejado los 20 kilómetros de carretera que restan
- Han retirado un camión de Greenpeace y levantado una sentada de activistas
El transporte nuclear con 11 contenedores "Castor" y 123 toneladas de residuos radiactivos ha llegado este martes a su destino final en el depósito de basura atómica de Gorleben, tras casi cuatro días de viaje y de constantes bloqueos protagonizados por activistas antinucleares.
Los camiones pesados con los gigantescos contenedores realizaron los últimos 20 kilómetros de viaje por carretera hacia el depósito de basura atómica de Gorleben sin incidentes, desde la estación de ferrocarril de Dannenberg hasta el depósito en el norteño estado alemán de la Baja Sajonia.
Poco antes los agentes habían retirado un camión de Greenpeace que bloqueaba la salida del convoy y retirado a miles de activistas antinucleares que protagonizaron toda la noche una sentada a las puertas del almacén de Gorleben.
Los manifestantes antinucleares consiguieron bloquear toda la noche el convoy y forzar que se alargara aún más el retraso en la operación de traslado de la basura atómica.
Un portavoz policial señaló que los agentes habían logrado desalojar a los activistas de Greenpeace que bloqueaban la carretera con un camión y que se habían atrapado en cemento para dificultar su retirada. Camuflado como un camión de reparto de bebidas, el vehículo fue cruzado en la carretera la pasada tarde y una vez parado, los activistas desplegaron emblemas de Greenpeace y anunciaron que deberían ser retirados por la fuerza.
Desalojo de 3.000 manifestantes
Mientras tanto, miles de agentes trabajaron afanosamente para despejar la entrada al depósito de residuos atómicos de Gorleben donde unos 3.000 manifestantes antinucleares han protagonizado una sentada toda la noche para evitar la llegada del convoy con once contenedores "Castor". Al igual que la noche anterior, los policías retiraron uno a uno en volandas a los activistas, que protestaron pacíficamente y no ofrecieron resistencia.
El sindicato de la policía reveló que unos 20.000 agentes participan en la operación para garantizar la seguridad del transporte, que se ha convertido en el más largo en la historia de los convoyes de contenedores Castor y el que mayor número de manifestantes ha concentrado.
El viaje del convoy de basura radiactiva hasta este depósito nuclear, que comenzó el viernes en la planta de reprocesamiento de La Hague (Francia), se ha visto interrumpido en numerosas ocasiones por las acciones de miles de antinucleares.
En las proximidades de Dannenberg se organizó este fin de semana la concentración antinuclear pacífica más concurrida en tres décadas, en la que participaron unos 50.000 manifestantes.