Eduardo Mendoza: "Un escritor tiene el compromiso moral de ser reflejo de su tiempo"
- El Premio Planeta 2010 presenta Riña de gatos: Madrid 1936
- El escritor catalán se resistió durante años a abordar la Guerra Civil
"Un escritor tiene el compromiso moral de ser reflejo de su tiempo". Así ha justificado Eduardo Mendoza su última novela y Premio Planeta 2010 Riña de gatos: Madrid 1936, una novela que "no es sobre la Guerra Civil, pero sí de la Guerra Civil" y de la que confiesa haber quedado "muy satisfecho".
El escritor catalán, en la presentación de los Premios Planeta 2010, ha explicado que la Guerra Civil es un tema que ha estado "muy presente en toda mi vida", al igual que en la de muchos españoles especialmente de la "inmediata posguerra", y, por eso mismo, hasta ahora se había "resistido" a abordarlo, hasta que pensó que "había llegado el momento".
Según Mendoza, el escritor debe cumplir con ese "compromiso moral" y "dejar constancia" de su tiempo "porque es la única que va a quedar de la manera de pensar y de estar en el mundo de sus contemporáneos".
Además, ha opinado que la Guerra Civil se estaba "convirtiendo en una abstracción" y él ha querido abordarla desde la perspectiva de los momentos previos, con unos personajes que no son conscientes de que están viviendo "un acontecimiento histórico".
De Barcelona a Madrid
El autor ha cambiado en esta novela su Barcelona natal, escenario de la mayoría de sus obras, por Madrid porque le convenía "cambiar de aires" y para ambientarla históricamente. Para Mendoza ha sido "motivo de felicidad" trabajar literariamente con Madrid, una ciudad con la que tiene muchos vínculos.
El ganador del Planeta ha confesado estar "mareado" con tanto acto público a consecuencia del premio y que lo que le gusta es estar en casa escribiendo y haciendo "cosas normales", aunque ha reconocido que "está muy bien".
El escritor catalán ha sido presentado por el actor Pepe Sacristán, que ha tomado la voz de uno de los personajes de la novela, Higinio Zamora Zamorano, para describir una novela "que es una peripecia bastante impresionante".
Riña de gatos: Madrid 1936 es la historia de un inglés llamado Anthony Whitelands, que llega a bordo de un tren al Madrid convulso de la primavera de 1936. Deberá autenticar un cuadro desconocido, perteneciente a un amigo de José Antonio Primo de Rivera, cuyo valor económico puede resultar determinante para favorecer un cambio político crucial en la historia de España. Turbulentos amores con mujeres de distintas clases sociales distraen al crítico de arte sin darle tiempo a calibrar cómo se van multiplicando sus perseguidores: policías, diplomáticos, políticos y espías, en una atmósfera de conspiración y de algarada.
La obra finalista
En el acto de presentación, conducido por el presidente del Grupo Planeta, José Manuel Lara Bosch, también se ha presentado la novela finalista, El tiempo mientras tanto, de Carmen Amoraga, una novela "con una pegada narrativa muy fuerte", según el escritor y cineasta Vicente Molina Fóix, encargado de introducirla.
La escritora valenciana se ha confesado emocionada por "haber conseguido escribir la novela que a mí me hubiera encantado leer".
Según la sinopsis, el libro es la historia de una mujer que espera vivir una vida de novela: la que se casa aunque sueña con reencontrarse con el amor de su vida al doblar la esquina; la niña que crece esperando que su vecino se fije en ella, y la convencida de que su conquista cruzará un océano para buscarla. Es la novela de María José, que sufre un accidente justo cuando ha recuperado el control de su vida. Y la novela de su madre, tan parecidas sin quererlo. Y también la de Marga, su amiga, que sueña por las dos. Y la de Fermín, Paco y Joaquín. Es la historia de todas esas personas, unidos por lazos de amistad, de amor o de familia, y que a pesar de ello se convierten en desconocidos. Sólo una mirada desde la distancia los ayuda a recomponer su propio mapa vital. Carmen Amoraga ha escrito una novela inolvidable.