El reelegido presidente iraquí Talabani encarga a Maliki formar un nuevo gobierno

• También ha sido elegido Al-Nayufi nuevo presidente del Parlamento
• El presidente ha pedido que el nuevo gobierno sea de "participación nacional"

El Parlamento iraquí ha reelegido al dirigente kurdo Yalal Talabani como presidente de Irak, en una sesión de la que estuvieron ausentes casi todos los representantes del grupo opositor Al Iraqiya.

Una vez reelegido para el cargo, Talabani, que recibió 195 votos de los 213 legisladores presentes, ha encargado al primer ministro saliente, Nuri al Maliki, la formación de un nuevo gobierno que ponga fin a los ocho meses de estancamiento del Ejecutivo.

Talabani anunció su decisión en el discurso que pronunció ante el  Parlamento nada más ser reelegido como jefe de Estado, un puesto que  tiene escasas funciones ejecutivas. Horas antes había sido nombrado portavoz del Parlamento iraquí el candidato del bloque suní Al Iraqiya Osama al-Nayufi.

El nombramiento de estas tres personas para ocupar puestos clave en el Estado es el resultado de un acuerdo de reparto de poder entre suníes, chiíes y kurdos, establecido tras intensas negociaciones entre las diversas formaciones iraquíes en las últimas horas, para sacar al país de una crisis política que ha durado desde las elecciones del pasado 7 de marzo.

En su declaración, Talabani ha afirmado que es necesario "un gobierno de  participación nacional" que empiece inmediatamente a cubrir las  necesidades de los servicios básicos.

Los diputados de Al Iraqiya abandonan el Pleno

Según la Constitución iraquí, a partir de su designación,  Al Maliki  tiene 30 días para nombrar su gabinete,  y tanto la lista de ministros  como su programa gubernamental necesitan pasar la aprobación del  Parlamento por mayoría absoluta.

Tras ser designado como jefe de Estado, Talabani afirmó que recibía el cargo "en una etapa muy delicada".

"Este fue un paso que esperó demasiado tiempo", ha agregado el presidente,  en referencia a los casi cinco meses que se ha tardado para elegir a  las máximas autoridades desde la primera reunión de la Asamblea, el 14  de junio.

"Hoy es un día de victoria para la voluntad libre de Irak",  ha añadido el jefe de Estado.

La reelección de Talabani y la designación de Maliki como primer ministro se ha llevado a cabo, a pesar de que dos tercios de los legisladores del bloque Al Iraqiya,  encabezado por el ex primer ministro Iyad Allawi,  abandonaran el Pleno, lo que demuestra la turbulenta relación entre los socios del nuevo gobierno.

EE.UU. lo califica de "un gran paso"

EEUU ha calificado de "gran paso" para Irak el acuerdo alcanzado en ese país para repartirse entre los distintos grupos las presidencias de la República y del Parlamento y la Jefatura del Gobierno, dado que representa a toda la sociedad.

"Es un gran paso para Irak", ha dicho un funcionario de alto rango del Gobierno del presidente Barack Obama en una conferencia telefónica con periodistas.

EE.UU. ha trabajado "muy duramente" con los iraquíes durante los últimos meses para lograr un sólo fin: la formación de un Gobierno representativo, que refleje los resultados de las elecciones, que incluya a todos los grandes bloques que representan a los grupos étnicos y sectarios del país y que no excluya o margine a nadie.

"Y eso es exactamente lo que ellos han decidido hacer. El resultado del reparto de poder es uno muy bueno para aquellos que trabajan por un Irak estable y pacífico y uno malo para aquellos cuya agenda es más sectarismo y violencia", indicó el funcionario.

Se ha producido, además, sin ninguna "influencia exterior, ningún actor externo o país extranjero", ha señalado otro funcionario de alto rango del Gobierno estadounidense.

La composición significa que "ni un solo bloque será capaz de dominar o monopolizar el poder en el Gobierno entrante", ha explicado.