El Gobierno da por muerta la cumbre euromediterránea a una semana de su convocatoria

• Iba a celebrarse el próximo 21 de noviembre en Barcelona
• Ya fue desconocada en junio por falta de acuerdo entre las partes
• Asegura que ella y Zapatero pactaron el último intento de Moratinos

La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha reconocido este viernes que no se han encontrado las condiciones adecuadas para celebrar la cumbre de la Unión por el Mediterráneo (UpM) convocada en Barcelona, aunque ha explicado que aún no se ha tomado la decisión definitiva para desconvocarla.

Jiménez se ha referido a esa cumbre, prevista para el sábado 21 de noviembre, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de ministros.

La titular de Exteriores ha recordado que esta cumbre estaba prevista inicialmente para el pasado mes de junio en Barcelona, pero que como se entendió entonces que no se daban las condiciones para ello, se pospuso y ha habido numerosas negociaciones para que pudiera ser realidad en noviembre.

Situación "complicada"

"Lamentablemente, aún no se ha conseguido que se pongan de acuerdo las partes", ha explicado la ministra, quien ha recordado también que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de acuerdo con ella, encargó al ex ministro Miguel Ángel Moratinos intentar unas últimas gestiones debido a su especial vinculación con Oriente Próximo.

Ha insistido en que "la situación está complicada",  pero ha señalado que será Zapatero junto a los copresidentes de la Upm, Nicolas Sarkozy y Hosni Mubarak, quienes adoptarán la decisión definitiva.