Zapatero niega a Gallardón su petición de refinanciar la deuda que vence el 31 de diciembre
- "Si no se modifica, se retrasarán los pagos a los proveedores", dice
- El alcalde de Madrid espera que el Gobierno reconsidere su postura
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha negado al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, su petición de refinanciar la deuda del Consistorio que vence el 31 de diciembre, según ha comentado el propio regidor tras el encuentro mantenido en Moncloa con el jefe del Ejecutivo.
Gallardón se ha reunido durante más de una hora con Zapatero para pedirle que todas las entidades locales puedan refinanciar su deuda hasta un importe máximo del 80% de los vencimientos de la misma, una reclamación respaldada por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Gallardón ha destacado que algunos ayuntamientos españoles "sufrimos una discriminación legal" tras la decisión del Gobierno de permitir a los consistoriso que estén en mejor situación financiera podrán pedir créditos el próximo año, cuya de.
La modificación se incluirá en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2011, que deberá votarse en el Congreso de los Diputados.
"Salgo habiendo trasladado al presidente para intentar conseguir algo justo. No he venido a pedir nada para Madrid, si no para todos los ayuntamientos de España", ha dicho Ruiz-Gallardón, para quien la "refinanciación de los vencimientos es fundamental para reducir tensiones en tesorería".
Modificación de cara al futuro
Gallardón ha asegurado tras el encuentro que Zapatero no se ha comprometido a "modificar la normativa para que todos los ayuntamientos puedan refinanciar la deuda" para el futuro.
El alcalde de Madrid ha subrayado que la normativa sigue en vigencia y que "estamos en expectativa hasta que se produzca la votación en el Congreso" de los presupuestos, momento en el que se puede modificar.
Gallardón ha alertado del peligro que se corre si no se cambia la ley ya que "la deuda financiera se cambiará por deuda comercial, lo que implicará un retraso mayor en los pagos a proveedores", aunque ha garantizado que no afectará al abono de las nóminas del Ayuntamiento ni a los servicios sociales esenciales.
La única reclamación que ha aceptado Zapatero de las planteadas por Gallardón ha sido la subrogación de la deuda de la sociedad Madrid Calle 30 por el Ayuntamiento, lo que supone una mejora técnica pero no una modificación del volumen total de la deuda del consistorio.
Madrid es la ciudad más endeudada del país: debe 7.314 millones. En el primer trimestre de 2010, los ayuntamientos españoles tenían una deuda de 36.085 millones de euros (el 3,4% del PIB), de los que 10.915 correspondían a los seis municipios de más de 500.000 habitantes (Madrid, Valencia, Zaragoza, Málaga, Barcelona y Sevilla).
Reunión pedida por Gallardón
El presidente del Gobierno y el alcalde de la capital han intercambiado sus puntos de vista sobre este asunto después de que mantuvieran entorno al mismo una "conversación-discusión" -según la denominó el alcalde- el día de la Fiesta Nacional este último 12 de octubre.
El alcalde explicó posteriormente que en aquel encuentro, que pudieron captar las cámaras, expuso a Zapatero "la realidad" y le solicitó para las corporaciones locales un trato semejante al que el Gobierno se da a sí mismo y da a las Comunidades Autónomas.
Una queja consecuencia de la decisión del Gobierno de que ayuntamientos fuertemente endeudados, como el de Madrid, no puedan refinanciar su deuda a partir del próximo año. Zapatero le solicitó un documento en el que explicara su posición, Gallardón se lo remitió y a partir de éste han debatido al respecto.
"Zapatero es un mentiroso"
Antes, el 7 de octubre, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, es un "mentiroso" por decir que el Ayuntamiento quiere endeudarse más y que está "profundamente envidioso" porque ve que "no ha hecho nada" por la ciudad.
"A él se le termina el curso y no tiene nada que decir sobre la inversión en Madrid y, como una rabieta de niño pequeño -dijo-, lo que hace es mentir y además intentar que nosotros no sigamos transformando la vida de los madrileños" con nuevas inversiones.