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Absuelven de la mayoría de los cargos al primer preso de Guantánamo juzgado por un tribunal civil

  • EE.UU. le acusa de los atentados de las embajadas en Kenia y Tanzania
  • Sobre él recaen 286 cargos, entre ellos, de la pertenéncia a Al Qaeda
  • El Pentágono lo considera uno de los 14 presos más importantes

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File drawing of Ahmed Ghailani, accused of involvement in the bombing of U.S. embassies in Africa, is depicted in this courtroom sketch of his arraignment, in New York
Retrato del preso de Guantánamo, Ahmed Ghailani, durante el su juicio en Nueva York

El tanzano Ahmed Khalfan Ghailani,  el primer preso de Guantánamo transferido a EE.UU. para ser juzgado en un tribunal civil y considerado por el Pentágono como unos de los 14 presos más importantes de Guatánamo, ha sido absuelto en Nueva York por casi la totalidad de los cargos que  se le imputaban, según informa Efe.

Ghailani estaba acusado de participar en los atentados de 1998 contra las embajadas estadounidenses en Kenia y Tanzania. Para el Pentágono, Ghailani era uno de los más valiosos presos de Guantánamo y cuatro de sus presuntos cómplices ya cumplen cadena perpetua en la prisión de máxima seguridad de Florence (Colorado).

Sobre Ghailani, de 36 años, pesaban 286 cargos y pasó por las cárceles de la CIA y por la prisión de Guantánamo. Sin embargo, el Tribunal federal del Distrito Sur de Nueva York sólo le ha condenado por un cargo, el que está relacionado con la conspiración para destruir edificios y propiedades gubernamentales.

Pese al acuerdo alcanzado entre los seis hombres y las seis mujeres que integraban el jurado, Ghailani podría ser condenado aún a una pena entre 20 años de prisión y cadena perpetua. La acusación lo consideraba uno de los principales responsables de los atentados contra las embajadas estadounidenses de Kenia y Tanzania en 1998 que fue reclamado por la red terrorista Al Qaeda, en las que murieron 224 personas.

Pertenencia a Al Qaeda

Durante el juicio, que se ha prolongado cuatro semanas, la acusación particular y la Fiscalía han tratado de probar que Ghailani perteneció a Al Qaeda, y que ayudó a comprar el camión que se utilizó para atentar en la embajada de Tanzania así como los materiales explosivos empleados en los ataques.

La defensa de Ghailani ha insistido desde el inicio en su inocencia, al considerar que sólo había ayudado a algunos amigos que él creía que eran empresarios y no personas involucradas con una red terrorista. También señaló que nunca fue a ningún campamento para adiestrarse como terrorista ni que pertenece a Al Qaeda.

Para la Organización para los Derechos Civiles y las Libertades (ACLU, en sus siglas en inglés) ha felicitado por lo que considera un veredicto "fiable" y ha indicado que este fallo "debe acallar los temores infundados que indican que nuestro sistema judicial federal no puede llevar a cabo un juicio justo, imparcial y eficaz en casos de terrorismo." También estable que este caso demuestra que "los tribunales federales no sólo son un buen lugar, sino también el lugar más eficaz para juzgar a los sospechosos de terrorismo".

Por su lado, varios congresistas republicanos se han manifestado en contra del fallo."Este veredicto trágico demuestra la locura absoluta que es la decisión de la administración Obama de juzgar a los terroristas de Al Qaeda en los tribunales civiles", ha dicho el congresista republicano Peter King, citado por Reuters.

De cárceles secretas a Guantánamo

Ghailani nació en Zanzíbar en 1974 en una familia modesta que terminó sumida en  la pobreza. Se formó en una escuela técnica donde estudió  informática. Las autoridades de EE.UU. consideran que comenzó a trabajar como agente de Al Qaeda en 1998,  y que participó en la compra y preparación de la camioneta que se  utilizó en el atentado de la embajada de EE.UU. en Dar Es Salaam

El Pentágono asegura que en 2001 que se unió a un grupo de africanos en Kandahar (Afganistán) en 2001 y tras la caída de los talibanes en 2001, huyo de Afganistán a Pakistán, donde fue detenido en julio de 2004. El acusado fue recluido en julio de 2004 en un centro secreto de la Central de Inteligencia Americana (CIA), donde pasó dos años.

Después fue trasladado a Guantánamo, donde permaneció encarcelado otros tres años más y en 2009 fue llevado a Nueva York. Al igual que otros detenidos, que afirma haber sufrido malos tratos durante su detención.

"Durante los dos primeros meses en la prisión secreta (...) fue sometido a un estado de indefensión, de estar física, emocional y psicológicamente incapaz de resistir", ha asegurado uno de sus abogados, Peter Quijano en declaraciones citadas por AFP.

Por otro lado, según el psiquiatra Saathof Gregory, "es evidente que el señor Ghailani fue abrumado por completo y tuvo dificultades para encontrar palabras o mirar a su interlocutor a los ojos cuando hablaba".